Julio César (100-44AC) habría dicho, en plena Guerra de las Galias, en el siglo I AC, aquello de «divide y vencerás». No hay constancia exacta de esas palabras, a pesar de lo mucho que escribió el romano sobre esa contienda, pero desde luego sí aplicó, y con éxito, esa estrategia. Luego, con el paso de los siglos, ha sido copiada por un sin número de líderes militares, pero también políticos. Es ahora lo que intentan hacer los «indepes» catalanes, eso sí, con la aquiescencia y ayuda del socialista Salvador Illa. El objetivo inmediato de los separatistas de Junts y de ERC es dividir –y por lo tanto debilitar– a todas las estructuras posibles del Estado español hasta casi su práctica desaparición. Es lo que pretenden con el intento de conseguir la cesión en exclusiva de la gestión en Cataluña del conjunto de tributos estatales a la Agencia Tributaria Catalana, según el acuerdo suscrito entre los «indepes» de Junqueras y los socialistas catalanes de Illa. El fraccionamiento de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) provocaría «graves perjuicios en la lucha contra el fraude fiscal» y «la recaudación tributaria perdería eficiencia», como apunta el informe «El coste de fragmentar la Agencia Tributaria», publicado ayer por Fedea y elaborado por Alberto García Varela, socio de política tributaria de EY, inspector de Hacienda y ex delegado especial de la AEAT en Andalucía.
García Valera defiende que la cesión a Cataluña de la Agencia Tributaria «no encuentra acomodo –escribe– en el artículo 149 de la Constitución que sólo atribuye a la Hacienda Estatal esta función, sino que además supondría un paso atrás en la aplicación del sistema tributario». También se pregunta: «¿qué ganarían ciudadanos o empresas con esa fragmentación». La respuesta es «nada y perderíamos en la aplicación de las mejores prácticas que permiten las economías de escala» y además «este servicio esencial para el Estado del bienestar no saldría más caro». A los «indepes», por supuesto, todo eso no solo no les preocupa sino que intentan que se aplique cuanto antes porque no solo persiguen más poder sino debilitar a todo lo que suene a España, según el milenario, eficaz y tantas veces aplicado consejo «divide y vencerás» atribuido a Julio César.