Cervantes es uno de los grandes de la literatura española, y su obra más famosa, sin lugar a dudas es "El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha", que narra las aventuras de este personaje y su fiel compañero, Sancho Panza. Lo cierto es que este autor, siempre relacionado con el protagonista de uno de los libros más vendidos de la historia (el que más de un escritor español), tiene un alto reconocimiento internacional, y tal es así, que en muchas ciudades de España, y también del mundo, conmemoran su vida. En Bruselas, por ejemplo, se encuentra la única estatua del Quijote en Europa fuera de nuestras fronteras.
Las estatuas de Don Quijote de la Mancha y Sancho Panza se encuentran en la Plaza de España (Place De L'Espagne, en francés) de la capital belga, que se encuentra cerca del centro de la ciudad y la famosa Grand Place. Aunque no se trata de una plaza de gran tamaño y renombre internacional, se trata de un pequeño lugar que solo aquellos que buscan explorar rincones menos conocidos y que visitan con calma Bruselas acceden a ella y la encuentran, al ser un espacio peatonal.
La plaza es un tributo a las relaciones históricas entre España y Bélgica, que se remontan a los siglos XVI y XVII. Con respecto a las estatuas, se tratan de un regalo de Madrid a Bruselas, inauguradas en mayo de 1989 junto a la plaza con motivo de la presidencia española en la Comunidad Económica Europea de ese año. Así, es un gesto de gratitud y un símbolo de colaboración entre ambas naciones.
Las estatuas refuerzan ese vínculo cultural hispanobelga, y rinden homenaje a una de las obras más influyentes de la literatura española, destacando la universalidad de los personales y la admiración hacia Cervantes. Son esculturas de unas tres toneladas (en conjunto), y mientras la de Sancho Panza mide unos 3,7 metros, la de Don Quijote alcanza los 4,5 metros de altura, realizadas por el escultor español Lorenzo Coullaut Valera.
Los Tercios Españoles jugaron un papel clave en la historia de Bélgica, especialmente en la región de Flandes, cuando formaba parte de los Países Bajos Españoles. No es el único homenaje que la comunidad belga hace a España, pues desde hace siglos, se celebra todos los años en Bruselas el desfile conocido como "Ommegang", en las que se conmemora la llegada de Carlos I y Felipe II, así como la ida y retorno de los "belgas españoles".
En Bélgica también se pueden ver otros rastros de la influencia españolas como monasterios e iglesias de arquitectura hispánica o la propia ciudad de Brujas, donde se realizan eventos a día de hoy y mantiene referencias históricas del vínculo.
Asimismo, la influencia española puede verse reflejada en otros países del mundo. Por ejemplo, ciudades como Pekín, Moscú o Nueva York se encuentra una réplica de la estatua de Cervantes instalada en la plaza de las Cortes, mientras que en México se puede hallar una reproducción en bronce de la madrileña escultura de la Cibeles.
