Hoy arranca el Dakar 2025 en el que Carlos Sainz deberá defender el título logrado el año pasado. Un desafío que esta 47ª será aún mayor. Enormes dunas de arena, una etapa cronometrada de 48 horas y más de 1.000 km, además de quince días llenos de giros y curvas en Arabia Saudí completan la carrera más famosa del mundo.
Sin embargo, participar en el rally más importante del mundo no es barato.
Para los coches la cifra mínima para poder competir es de, aproximadamente, 33.240 dólares (unos 32.400 euros), ya sea en las categorías de Ultimate, Stock, Challenger o SSV. No obstante, los pilotos podrán optar por distintos tópicos de descuento, ya que los que tengan mas de diez participaciones serán catalogados como “Leyendas” y aportarán 1.558 dólares menos (Unos 1.500 euros). Por otro lado, los que realicen un “Apadrinamiento” a alguien de su misma modalidad que corra por primera vez tendrán un beneficio de 3.116 dólares (poco más de 3.000 euros).
Otro de las opciones para obtener una rebaja es el de “Comunicación”, ya que, si cumplen con ciertos requisitos, como el nivel de interacción en redes sociales, obtendrán un descuento de 520 euros.
Sin embargo, hay otros costos a tener en cuenta: precio o alquiles de los vehículos, las licencias de la FIA, las caravanas, y cada uno de los trabajadores de los equipos. De esta manera, se puede llegar a gastar hasta 831.000 euros al final de la competición.
En la categoría de motos se sigue un sistema similar, porque tanto en RallyGP como Rally2 se deben pagar 20.000 euros de tarifa de participación, y también se incluyen los gastos de desplazamiento del vehículo desde Europa hasta Arabia Saudita, los equipos de seguridad y navegación y la entrada al campamento. Y al igual que en los coches, hay una serie de descuentos, con 900 euros para los que entren en 'Leyenda', y hasta 1.000 euros en cuestión de 'Apadrinamiento', más los 500 euros por la 'Comunicación'.
Unos costes que no parecen compensar los premios que se llevan los campeones.
Los pilotos que consigan el primer puesto en cada una de las categorías principales (coches, motos, quads, camiones y vehículos ligeros) se llevarán un premio de 50.000 euros.
A su vez, quienes lleguen detrás también serán bonificados. Los escoltas como premio económico recibirán 30.000 euros (segundo puesto) y 20.000 mil para el tercero. Además, se otorgarán incentivos adicionales para los pilotos que logren destacarse en etapas individuales o que lideren tramos específicos de la competencia. Estas bonificaciones están diseñadas para mantener la motivación alta en cada jornada del rally.
Sin embargo, los ganadores de Ultimate, la categoría principal de coches que acapara la mayoría de los focos de la carrera, son los únicos que no optan a conseguir un premio más allá del codiciado "Touareg".
Sobre cuatro ruedas sí lo harán, con premios de 5.000, 3.000 y 2.000 euros para los tres que pisen el podio en Stock, Challenger, SSV y camiones, y algo menos, 3.000, 2.000 y 1.000 se llevarán el top-3 de 4x2 y de la clasificación de mujeres, que también compiten en una clase independiente para ellas.