Seguro que te he pasado que ves un accesorio y, de primeras, no te convence, pero luego lo ves puesto en otras personas y te encanta. En este sentido, las tendencias tienen mucho que decir. Al final, ves tanto ese complemento, que te vuelves a replantear el ponértelo. Sucede igual que con la canción de moda. Que la escuchas tanto que te termina gustando. Esta sensación se puede adaptar a casi cualquier producto: unos zapatos, una chaqueta, un bolso, un olor o un color. Y el caso que nos ocupa hoy abarca dos de ellos: un bolso y un color.
Si bien el color burdeos es el tono tendencia indiscutible del otoño-invierno —podemos verlo en uñas, prendas de ropa y productos de maquillaje—, hay una tonalidad de bolso que coincide entre todas las mujeres elegantes. Se trata de una mezcla entre burdeos y marrón, concretamente, el color coñac. Un accesorio teñido de este tono eleva cualquier 'look' al momento.
Un bolso color coñac es un accesorio muy versátil y elegante. El color coñac es un tono cálido y terroso que combina tonos marrones y rojizos, similar al cuero natural o al coñac, la bebida que le da el nombre. Es una opción excelente para complementar 'outfits' tanto casuales como más formales.
Aunque se trata de un color muy versátil, dependiendo de la ropa que llevemos, el bolso dará ese toque final maestro. ¿En cuanto a joyería? El cuero coñac combina perfectamente con accesorios dorados o tonos metálicos cálidos.