Los criptoactivos ganan popularidad entre los españoles. Aunque su volatilidad, alto riesgo y falta de regulación habían mantenido a buena parte de los inversores alejados durante años del universo "cripto", cada vez más se aventuran a incluir estos activos en su cartera para mejorar sus rendimientos. El Banco Central Europeo (BCE) ha corroborado esta tendencia en su "Estudio sobre las actitudes de pago de los consumidores en la zona euro", según el cual casi uno de cada 10 españoles (9%) posee criptoactivos, una tasa que se ha más que duplicado respecto a 2022, cuando sólo era del 4%.
De esta manera, los inversores españoles siguen la misma línea de crecimiento en criptoactivos que los de la eurozona. En el conjunto de la zona euro la proporción de encuestados que dijeron poseer criptoactivos ha pasado del 4% en 2022 al 9% en 2024, un nivel que el BCE considera "bastante bajo". Sin embargo, esta tendencia al alza podría acelerar en los próximos años tras la victoria electoral de Donald Trump, que disparó la cotización de bitcóin, la criptomoneda con mayor valor del mercado, por encima de los 100.000 dólares por unidad a principios de diciembre, aunque actualmente se ha moderado a 95.000 dólares.
Entre los veinte países del euro, sólo 13 informaron de porcentajes de tenencia de criptoactivos superiores al 10%, correspondiendo los más significativos a Eslovenia (15%) y Grecia (14%), mientras que Irlanda, Croacia, Chipre, Letonia y Austria informaron de una proporción del 13%. En el extremo opuesto, los países de la zona euro con un menor porcentaje de personas que declararon poseer criptoactivos en 2024 fueron Alemania y Países Bajos, con un 6% en ambos casos, por delante de Estonia, con un 7%, y de Lituania, con un 8%.
En línea con el 9% de España y de la media de la zona euro también se situaron los franceses e italianos, aunque en 2022 en el país galo la proporción era de alrededor del 3% y en el país transalpino ligeramente superior al 2%. En términos de edad, el BCE explica que las personas de entre 25 y 39 años fueron las más propensas a poseer criptoactivos, seguidas por aquellas de entre 18 y 24 años.
Jóvenes de todo el mundo mostraron su euforia en redes sociales por el "rally" alcista que las criptomonedas, especialmente el bitcóin, experimentaron en los días posteriores a la victoria de Trump, que el próximo 20 de enero tomará posesión como el presidente número 47 de Estados Unidos. El empresario prometió convertir a EE UU en "capital mundial cripto" y establecer una "reserva estratégica" de bitcóin, similar a las reservas de oro y petróleo que tiene el país.
Asimismo, designó a Paul Atkins como nuevo presidente de la SEC, quien ya fue comisionado de la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por sus siglas en inglés) entre 2002 y 2008 bajo la presidencia de George W. Bush y que era el candidato favorito entre los inversores de criptomonedas, ya que se prevé que establecerá una regulación más laxa que se aleje del escepticismo y escrutinio del Gobierno de Joe Biden con Gary Gensler al frente de la SEC. Todos estos cambios podrían impulsar la entrada de más y más inversores en el mercado de los criptoactivos.
La mayoría de los encuestados por el BCE (54%) señalaron a la entidad monetaria que su apuesta por los criptoactivos era únicamente un medio de inversión, mientras que el 16% los usa como medio de pago y un 19% para ambos. No obstante, hay importancias diferencias según el país analizado.
En los Países Bajos, el 90% de los encuestados informó que utilizaba criptoactivos solo para inversión, mientras que solo el 2% los usaba únicamente para pagos. Un total del 82% de los encuestados en Alemania declaró usar los criptoactivos únicamente con fines de inversión, dejando el uso como método de pago solo a un 6%. Francia registró la menor diferencia entre ambos usos, con un 57% utilizándolos exclusivamente para inversión y un 25% únicamente para pagos. En el caso de España, un 57% declaró su uso exclusivo como inversión, frente al 19% que los usa únicamente para pagos.
Asimismo, entre aquellos que usan criptoactivos tanto con fines de pago como de inversión, el mayor porcentaje se observó en Lituania, con un 30%, por delante del 29% de Chipre y Bélgica, mientras que sólo el 4% en los Países Bajos dijo lo mismo. En España, un 20% de los encuestados que tienen criptoactivos indicó su uso para inversión y pagos.