La libertad económica mundial ha retrocedido debido a las políticas implementadas en respuesta a la crisis sanitaria de la COVID-19. Según el Economic Freedom of the World (EFW) 2024 Annual Report, publicado por el Fraser Institute de Canadá y la Fundación para el Avance de la Libertad en España, la media global de libertad económica ha caído a 6.56 puntos, el nivel más bajo desde 2009.
La media mundial, que alcanzó su punto más alto de 6.80 en 2018, ha mostrado una tendencia descendente desde el inicio de la pandemia. El informe, basado en datos económicos de 2022, atribuye este descenso a las políticas aplicadas durante la crisis sanitaria, como los confinamientos, restricciones de movilidad y cierres de negocios. Además, el gasto público y los niveles de deuda gubernamental aumentaron significativamente debido a los paquetes de estímulo económico. Estas medidas, aunque necesarias para mitigar los efectos inmediatos de la pandemia, han tenido consecuencias adversas para la libertad económica, revirtiendo avances previos y provocando una caída más pronunciada que durante la crisis financiera de 2008.
Hong Kong recupera el primer lugar del índice tras haber sido desplazado por Singapur en 2023, con una diferencia mínima de solo tres centésimas. El Top 5 lo completan Suiza, Nueva Zelanda y Estados Unidos, que mantienen su posición aunque con ligeros descensos en sus puntuaciones. Suiza, por ejemplo, pasa de 8.47 a 8.43, mientras que Estados Unidos baja de 8.14 a 8.09.
España, por su parte, mejora dos centésimas y escala siete posiciones, situándose en el puesto 30 del ranking global. Esta mejora se atribuye principalmente a avances en las áreas de tamaño del gobierno, sistema legal, derechos de propiedad y regulación. España se encuentra justo detrás de países como Portugal (27), Estonia (20) y Países Bajos (18), destacándose como uno de los países de la región con mejor desempeño reciente.
En Europa del Este, países como Georgia y Estonia sobresalen al implementar políticas que mejoran su entorno regulatorio y atraen inversión extranjera. En contraste, Ucrania y Moldavia registraron las mayores caídas debido a la inestabilidad provocada por la guerra y los conflictos regionales.
En Latinoamérica, Argentina ocupa la posición 159 de 165 jurisdicciones, situándose entre las economías menos libres del mundo, junto con países como Venezuela, Siria y Sudán. El informe destaca que las políticas populistas, la inflación descontrolada y la intervención estatal han reducido drásticamente la libertad económica en el país. Sin embargo, los datos reflejan la situación de 2022, por lo que los posibles efectos de las políticas del nuevo gobierno no se verán reflejados hasta ediciones futuras.
El informe subraya los beneficios de la libertad económica. En las economías más libres, el PIB per cápita promedio es de $52,877, muy por encima de los $6,968 de las economías menos libres. Además, la esperanza de vida es 16 años mayor, y la incidencia de la pobreza extrema es significativamente más baja. Los ciudadanos de estas economías también reportan un 40% más de satisfacción con sus vidas y muestran mayor tolerancia hacia minorías, géneros e inmigrantes, así como un mejor desempeño en indicadores de sostenibilidad ambiental y percepción de corrupción.
En definitiva, el EFW 2024 Annual Report refleja un retroceso que equivale a más de una década de avances en libertad económica. La pandemia y las políticas restrictivas han generado un impacto global significativo, limitando la capacidad de los ciudadanos para tomar decisiones económicas libres. España, sin embargo, destaca por su recuperación en el ranking, consolidando su posición como una de las economías europeas con mayor potencial de mejora en este ámbito.