Más de 1.000 millones de dólares en 15 semanas, esta es la cantidad de dinero que la candidata demócrata, Kamala Harris, logró recaudar para su campaña en tiempo récord. Una campaña que finalmente no le ha llevado a la Casa Blanca, tras perder los estados clave, y el voto popular frente a Donald Trump el pasado 5 de noviembre.
No obstante, apenas dos semanas después de la celebración de las elecciones presidenciales, las finanzas de la campaña de Harris se encuentra en el punto de mira. Sus donantes están recibiendo nuevos emails para aportar más dinero al apodado como 'Fondo de Lucha de Harris', mientras crecen las dudas sobre su viabilidad.
De acuerdo al 'New York Times', la campaña de Harris llegó a gastar semanalmente cerca de 100 millones de dólares. Una cantidad que fue en su mayoría destinada a la inversión en publicidad, tanto en medios tradicionales como en redes sociales, a contratar personal para contactar por teléfonos a los votantes, e ir puerta por puerta, así como la organización de multitudinarios mítines.
Actos que llegaron a contar con la aparición de grandes estrellas como Beyoncé, o la actuación de otros artistas como Lady Gaga, Christina Aguilera o Katy Perry, posicionándose así a favor del Partido Demócrata. Muchos ciudadanos estadounidenses se han cuestionado si este apoyo fue a cambio de dinero, y ha sido la conocida presentadora Oprah Winfrey quien les ha ofrecido una respuesta.
En septiembre, Winfrey estuvo a cargo de la moderación de 'Unite for América', en Michigan. Un evento de campaña con formato de programa de televisión, que nuevamente contó con el cameo de celebridades como Meryl Streep, y que fue paralelamente retransmitido a través de streaming. De acuerdo con el medio 'Washington Examiner', el coste del mismo alcanzó el millón de dólares, y fue abonado a la productora de Winfrey, Harpo Productions.
Tanto Harpo Productions como la propia Oprah Winfrey se apresuraron a desmentir que el pago hubiese estado dirigido a la presentadora, alegando que, en su lugar, estaba destinado a financiar el coste de producción del acto.
Las acusaciones de pago a celebridades para impulsar su campaña no es la única sombra que acecha a la campaña de Harris. Medios como AP también se han hecho eco de la decisión de dejar de pagar a una importante parte del personal de alto rango desde el pasado sábado. De esta forma, la campaña estaría incumpliendo su promesa de extender el salario hasta finales de este año, aunque ha querido compensar a los afectados confirmando que sí contarán con seguro médico hasta diciembre.
El director financiero de la campaña de Harris, Patrick Stauffer, ha querido desmentir a través de un comunicado que hubiera "deudas pendientes ni facturas vencidas" el día de las elecciones, además de prometer que "no habrá deudas" en futuro. Será en diciembre cuando los partidos tengan que presentar sus cuentas a la Comisión Federal Electoral.