La revalorización de las pensiones es un tema muy sonado en los últimos meses del año. Se trata de una pensión contributiva que está muy ligada al IPC, puesto que son los datos del año anterior los que marcan de manera directa la ayuda que recibirán los pensionistas.
Tras la reforma de las pensiones aprobada en 2023, las pensiones contributivas en España se ajustan anualmente en base a la media interanual del IPC, entre diciembre del 2023 y noviembre del 2024. Esto permite que los beneficiarios mantengan su nivel de vida a pesar de la inflación que sufre el país. Por tanto, tan solo falta conocer el dato de noviembre para poder saber cuál será la revalorización exacta de las pensiones para el año 2025.
Para conocer la subida exacta de las pensiones, lo primero que hay que saber es que la revalorización se calcula anualmente en función del Índice de Precios al Consumo (IPC) de los 12 meses previos al mes de diciembre del año anterior.
Si bien en enero de 2024, el incremento fue del 3,8%, las previsiones estiman una subida del 3,06% para 2025. De ser así, este incremento dejaría la pensión media en alrededor de 1.293 euros mensuales, lo que supone una subida de 35 euros respecto a la actual. Por su parte, las pensiones de jubilación ascenderían a 1.486 euros, mientras que las de incapacidad permanente alcanzarían los 1.196 euros. En cuanto a las pensiones de viudedad y orfandad, quedarían en 923 y 516 euros respectivamente.
El dato definitivo no se conocerá hasta el 28 de noviembre, que será cuando se publique el dato estimado de inflación del mes de noviembre, para finalmente ser confirmado el próximo 13 diciembre. Será a partir de entonces cuando los pensionistas podrán conocer de manera oficial la revalorización de sus pensiones de cara al próximo año.
En el último año, estos han sido los datos de inflación según el INE:
En caso de confirmarse este aumento, los principales beneficiados serían los ciudadanos que perciben prestaciones por jubilación, incapacidad y viudedad, así como las personas que reciben pensiones no contributivas y el Ingreso Mínimo Vital. Estas últimas subirán anualmente entre 2024 y 2027 para alcanzar el 75% del umbral de pobreza para hogares unipersonales.
En concreto, el Ingreso Mínimo Vital aumentará en 350 euros el próximo año, tal y como queda reflejado en el Real Decreto-ley 2/2023. Se espera que el Ingreso Mínimo Vital se incremente un 14,1%, tratando de contrastar el aumento de los precios y permitiendo a las familias poder hacer frente a los gastos necesarios. Por ello, esta renta básica podría alcanzar los 7.600 euros al año, lo que se traduce en unos 633,33 euros mensuales.