Quedan tan solo unas horas para conocer quién será el próximo presidente de Estados Unidos. Este martes están llamados a las urnas más de 200 millones de estadounidenses, que deberán decidir si quieren que el polémico magnate, Donald Trump, repita mandato en la Casa Blanca o bien que Kamala Harris se convierta en la primera mujer en hacerse con el cargo. Más de 74 millones de ciudadanos ya habrían depositado su voto.
Las encuestas continúan sin mostrar un ganador definitivo, y previsiblemente los conocidos como estados clave o "swing states", entre los que se encuentran Arizona, Carolina del Norte o Nevada, serán decisivos en unos comicios con gran relevancia también a nivel internacional. Conscientes de esto, tanto el candidato republicano como la candidata demócrata, han optado por apurar las últimas horas de campaña recorriendo estos estados con la celebración de múltiples mítines.
Precisamente durante un acto en la localidad de Lilitz, Pensilvania, Donald Trump elevó el tono, arremetiendo contra los medios de comunicación y volviendo a sembrar dudas sobre el sistema electoral a raíz de su derrota en las elecciones de 2020. Unas sospechas que derivaron en el asalto al Capitolio del seis de enero 2021. Kamala Harris una vez más ha tratado de rebatir a Trump, mostrando su confianza en el proceso. La actual vicepresidenta demócrata anunció, durante un acto de campaña en Michigan, que ya ha emitido su voto por correo con las siguientes palabras: "Mi boleto está en camino a California y voy a confiar en el sistema". Harris ha incidido en que "los sistemas que están en marcha para esta elección tienen integridad".
Resulta complicado conocer con exactitud cuándo se sabrá qué candidatura es la ganadora. En las elecciones presidenciales de 2020 no se conoció el ganador hasta cuatro días después, mientras que en 2016 se supo a las pocas horas, ya que Donald Trump ganó en la mayoría de estados indecisos frente a Hillary Clinton. Otro de los aspectos clave para entender que los resultados no se conozcan de forma simultánea en los 50 estados, es el hecho de que cuentan con más de tres husos horarios. De igual manera, podrían producirse alegaciones que den pie a procesos legales, retrasando los recuentos definitivos.
El próximo 5 de noviembre será el día de las elecciones, donde además de determinar quién será el presidente de Estados Unidos, también se renovarán los miembros de la Cámara de Representantes, así como una tercera parte del Senado y cargos estatales. Cerca de mes y medio después, el 17 de diciembre, será el turno del Consejo Electoral, conformado por 538 integrantes, que nombrará oficialmente al nuevo presidente.
El 6 de enero la Cámara de Representantes y el Senado certificarán los votos electorales, y finalmente, el próximo 20 de enero se celebrará la toma de posesión del presidente electo en el Congreso.