A principio de agosto, saltó una noticia sorprendente en plenos Juegos Olímpicos. La nadadora, Luana Alonso recibió un comunicado del Comité Olímpico Paraguayo donde la pedían que abandone la Villa Olímpica de manera inmediata debido a que “su presencia está creando un ambiente inadecuado” para el resto de sus compatriotas. “Se le solicita de manera inmediata su retiro de la Villa de atletas del citado evento. Su presencia está creando un ambiente inadecuado en el seno del Team Paraguay. Le agradecemos que proceda conforme a lo que se le indica, ya que ha sido por su propia voluntad que no ha pernoctado en la Villa de Atletas”, señaló Larissa Schaerer, jefa de misión del COP, en el comunicado enviado a la atleta por correo electrónico. Aquello quedó como una anécdota, pero la fama de Alonso empezó a crecer. Primero, porque empezó se retiró del deporte y tiempo después se abrió su propia cuenta de Only Fans.
En su cuenta de Only Fans, Luana se promociona como “tu exnadadora favorita” ofreciendo contenido exclusivo, incluyendo fotos y videos, por una suscripción de 35 dólares al mes.
“Te prometo que no te arrepentirás de esto”, escribió en la descripción de su perfil y las respuestas no se hicieron esperar. Muchos comentarios en las redes sociales criticaron su decisión, afirmando que “estaba cantado, cuestión de tiempo” y que “solo ella lo alargaba” y "no sabe lo que hace". Algunos opinaron que Paraguay “no está preparado para esta conversación” y consideran esta nueva etapa de Luana como “nadar en la degeneración”.
Cabe destacar que Luana había estado en boca de todos después de las revelaciones que hizo a principios de agosto, cuando, en medio de su creciente fama, reconoció un supuesto contacto con la superestrella del fútbol Neymar.
La confesión llegó en una entrevista con el programa Aire de Todos en el medio paraguayo GEN, donde Alonso comentó que después de recibir un “like” en una de sus publicaciones, Neymar le envió un mensaje privado. “Me tiró un DM”, aceptó Luana, aunque prefirió no profundizar mucho más en el contenido del mensaje, agregando: “Hasta ahí puedo decir”.