El Día de la Hispanidad siempre da para mucho análisis, desde los looks en el desfile militar a los gestos en la tradicional recepción en el Palacio Real de Madrid. Si antes nos fijábamos en el uniforme de la Princesa Leonor, ahora lo vamos a hacer con este detalle curioso del que todo el mundo está hablando. Porque no solo de los looks de la Reina Letizia e Isabel Díaz Ayuso viven los análisis estilísticos de este 12 de octubre, también del uniforme militar de la heredera.
El año pasado, fue el primero en el que la Princesa Leonor vistió por primera vez de uniforme militar. La mayor de las hermanas lució el traje militar de gala del Ejército de Tierra, en color verde oscuro con camisa blanca y corbata negra. Además, como elemento decorativo, llevó un cordón en color dorado y un fajín con la bandera de España. Pero en esta Hispanidad 2024 la heredera ha lucido el uniforme de la marina que se caracteriza por el sombrero bicornio, una de las piezas más distintivas del uniforme de gala naval, con detalles dorados y el escudo de la Armada Naval en la parte frontal y guantes blancos. Un uniforme de los más elegantes del ejército.
No es de extrañar que la Princesa Leonor esté incitando a las nuevas generaciones a incorporarse en las fuerzas armadas, según hemos escuchado en la retransmisión de la 1 de RTVE, el índice de mujeres en las fuerzas armadas desde que la Princesa ingresase ha aumentado en un 2%, acuñándolo como el fenómeno de la 'Leonormanía', y no solo de esto tendrían que estar orgullosos sus padres los Reyes de España, también nos hemos enterado de que la Princesa Leonor es una de las alumnas más aventajadas de su curso, por ello han incluido un nudo llano en el lado izquierdo del uniforme, un detalle que cada promoción otorga a muy pocos alumnos y alumnas. Este detalle no solo demuestra su excelencia como alumna, sino también su capacidad para inspirar a las nuevas generaciones, consolidándose como una figura clave tanto en la Casa Real como en la sociedad española.
Sin duda, este nudo llano es un reconocimiento más que merecido para una joven que, con solo 18 años, ya ha comenzado a forjar su propio camino en la historia de España. Un símbolo de que el futuro de la Corona está en más que buenas manos.