La inclusión de mujeres trans en el deporte femenino genera una gran controversia por las supuestas ventajas que ofrece un “cuerpo biológicamente masculino” pero ¿Qué pasa cuando es al revés?.
Los chicos trans también se enfrentan a una lucha titánica por romper barreras y este es el caso de Fénix, que se ha convertido en el primer equipo trans masculino federado de Europa y acaba de debutar en la Liga catalana.
No es nada nuevo para los miembros de este equipo jugar al fútbol, pero sí es diferente la forma de hacerlo: sin discriminación. Hace un año nacía el Fénix FC con un objetivo que se ha hecho realidad, ya que se ha convertido en el primer equipo trans federado de Europa. 30 futbolistas jugando en la Liga catalana masculina gracias a la idea de Hugo Marlo, cantante, futbolista y activista trans conocido por haber formado parte de los programas 'Got Talent' y 'La Voz'.
De su sufrimiento en el campo nació el cambio. A través de las redes sociales creó un lugar seguro, un equipo donde estar a gusto dentro y fuera del partido. Algunos de su jugadores fueron expulsados de sus equipos y otros nunca se habían atrevido a competir.
Empezaron a jugar en enero de 2023 y han sido apadrinados por la Penya Recreativa de Sant Feliu de Llobregat (Barcelona). La pasada temporada jugaron en la Liga de Fútbol 7, pero esta ya han dado el el salto al fútbol 11, en cuarta catalana. Desde esta temporada 2024/2025 el primer equipo federado compuesto por jugadores trans compite en el grupo 22 de la Cuarta Categoría Catalana. Debutaron el pasado 21 de septiembre y encajaron 19 goles pero el resultado era lo de menos tras haber conseguido el sueño de convertirse en el primer equipo transgénero dentro de una categoría de fútbol en España. De hecho, en tres jornadas disputadas, el conjunto ha encajado 74 goles y no ha conseguido anotar ninguno pero no se desaniman. Su victoria va más allá del partido. Como escudo, un Ave Fénix, símbolo de lo que han conseguido de esa valentía que les ha hecho renacer de sus cenizas.
Entre su logros deportivos, ser subcampeones del 1º Torneo de la Queer's League.
Su fundador, Hugo Marlo, tenia claro que el balón era una de sus pasiones pero necesitaba un cambio: “Era un chico jugando en un equipo de chicas pero sin el DNI cambiado, entonces no podía jugar aún con chicos”.
Antes de la aprobación de la ley Trans, recuerda Hugo, había que tomar hormonas durante dos años para poder cambiar el género en el DNI. Este joven sabía que, cuando hiciera ese trámite, ya no podría jugar más en equipos femeninos. A pesar de que estaba sufriendo mucha transfobia, sabía que dar el paso y jugar con equipos masculinos podía ser “mucho peor”.
“La sola idea me daba muchísimo miedo. Hugo temía los insultos dentro y fuera del campo. Pero sobre todo fuera. Los vestuarios son algo muy chungo. No quería ni imaginarme estar en esos contextos con chicos cis”, se lamentaba el joven. Por eso, cuando se cambió el DNI, dejó de jugar a fútbol. Colgó las botas durante tres años, hasta que dijo basta. No estaba seguro de si funcionaría pero subió una publicación a su Instagram buscando chicos trans con los que formar un equipo y la respuesta fue brutal.
En pocos días se juntaron 20 jóvenes, de entre 18 y 30 años, con ganas de jugar. Algunos son veteranos con experiencias a las espaldas como las de Hugo, quien ejerce de capitán. Todos ellos ahora forman parte de este equipo de fútbol que ha conseguido desafiar lo prejuicios y los trámites burocráticos.
Un gol por toda la escuadra contra la discriminación y la intolerancia.