Alquilar una vivienda puede resultar el doble o más rentable que invertir en deuda pública española. La rentabilidad bruta de la compra de una vivienda para ponerla en el mercado del arrendamiento ha crecido durante el tercer trimestre hasta el 7,2%, ya que al finalizar el verano de 2023 el retorno que ofrecía se situaba en el 7,1%. Según el estudio realizado por la web idealista, la rentabilidad obtenida casi duplica, en el peor de los productos inmobiliarios analizados, las tasas que ofrecen los Bonos del Estado a diez años (3%).
Según este estudio, que relaciona los precios de venta y el retorno obtenido por su alquiler durante un año de distintos productos inmobiliarios para calcular su rentabilidad bruta, las oficinas se mantienen como la inversión inmobiliaria más rentable. Comprar una oficina en España para alquilarla ofrece una rentabilidad bruta del 11,7%, que se reduce desde el 12,7% que daba hace doce meses. Los locales ofrecen un rendimiento del 9,7% (9,8% hace un año) y en el caso de los garajes se sitúa en el 6%, por debajo del 7,7% de septiembre de 2023.
En lo que a la rentabilidad de la vivienda se refiere, entre las capitales españolas, Murcia es la que resulta más rentable, ya que alcanza el 8,1%, seguida por las ciudades de Lleida (7,6%), Huelva (7,4%), Jaén y Castellón de la Plana (7,2% en ambos casos). Con un 6,9% están las ciudades de Ávila, Almería y Zamora, mientras que en Santa Cruz de Tenerife se queda en el 6,8%. A continuación se sitúa un grupo de cinco ciudades, con una rentabilidad bruta del 6,7%: Alicante, Cuenca, Palencia, Guadalajara y Córdoba.
San Sebastián es la ciudad donde la rentabilidad es más reducida (3,9%), seguida por Cádiz (4,5%), A Coruña (4,8%), Palma (4,8%) y Pamplona (4,9%). En Madrid la rentabilidad alcanza el 5,2% y en Barcelona llega hasta el 5,9%. En casos como los de San Sebastián, Palma, Madrid o Barcelona, la rentabilidad se resiente dado que, aún tratándose de algunas de las ciudades con los alquileres más altos, también encabezan el listado de las que tienen precios de venta más elevados, lo que impacta en el retorno logrado.