Las fuerzas rusas han completado la toma de la localidad de Krasnogorivka, en el eje de Kurajove del frente de la región oriental de Donetsk, según el canal de Telegram ucraniano DeepState, cercano al Ministerio de Defensa de Kiev y que sigue la evolución de la guerra a diario. “El enemigo termina la ocupación completa de Krasnogorivka”, escribe DeepState en referencia a este municipio ucraniano que antes de la guerra tenía más de 16.000 habitantes y se suma a las decenas de localidades tomadas por Rusia en los últimos meses en sus avances lentos pero constantes en la región de Donetsk.
Durante la pasada jornada, las fuerzas rusas lanzaron en los ejes de Toretsk, Pokrovsk y Kurajove 17, 21 y 18 ataques respectivamente, según el primer parte ofrecido este lunes por el Estado Mayor de Kiev. Tras tomar el bastión ucraniano de Vugledar -que tenía antes de esta guerra 14.000 habitantes y era objetivo ruso desde que comenzó la invasión- a principios de la semana pasada, Rusia continúa su ofensiva en Donetsk y sigue apretando en los tres ejes citados del frente en esta región de Ucrania oriental.
En las últimas 24 horas, el Ejército ruso también a lanzado 18 ataques en el eje de Limán, entre las regiones de Donetsk y Járkov (noreste), según el parte del Estado Mayor. Estas informaciones del Estado Mayor ucraniano sugieren que las tropas rusas que atacan en el este están repartiendo en más puntos del frente unos esfuerzos que solían concentrarse últimamente en Pokrovsk, Kurajove y Vugledar.
Ucrania está a la defensiva en prácticamente todo el frente desde hace alrededor de un año, cuando se agotó sin los resultados esperados su última contraofensiva.
Kiev trató de frenar el avance ruso a principios de agosto con su operación transfronteriza más ambiciosa de toda la guerra, que le ha permitido controlar decenas de localidades en el óblast ruso de Kursk.
Pero la operación no ha tenido el efecto deseado de parar el avance ruso en Donetsk pese a haber obligado a Rusia a transferir parte de sus tropas para defender esa parte del territorio de la Federación Rusa atacado por Kiev.
Al evaluar la situación en el frente, los portavoces ucranianos insisten en el alto número de bajas y pérdidas materiales con que Rusia logra sus avances en el este de Ucrania, y confían en que el alto precio que está pagando por estos logros lleve en algún momento a un colapso de las capacidades de ataque del Ejército del Kremlin. EFE