La Sociedad Española de Neurología (SEN) ha señalado que, actualmente, la meningitis causa 300.000 defunciones al año en todo el mundo, a pesar de que muchos casos se podrían prevenir mediante la vacunación y que, a pesar de los importantes progresos logrados en los últimos años para reducir la incidencia de la meningitis, se estima que en los próximos años se duplique el número de casos anuales, informa Ep.
No obstante, las estimaciones no contemplan que aumente de igual forma el número de defunciones, debido a las mejoras en la identificación de la enfermedad, prevención y tratamiento, aunque sí aumentará el número de personas con secuelas por esta enfermedad.
"La meningitis es una infección grave de las meninges, es decir, de las membranas que cubren el cerebro y la médula espinal, que puede ser causada por muchos agentes diferentes, pero principalmente por bacterias, hongos o virus. Es una enfermedad que puede ser devastadora, ya que si se desarrolla de forma grave presenta hasta un 10% de mortalidad y hasta un 30% de secuelas graves, por tanto sigue siendo un gran desafío para la salud pública", explica la secretaria del Grupo de Estudio de Neurología Critica e Intensivista de la Sociedad Española de Neurología, la doctora Marta Guillán Rodríguez.
"La meningitis de origen bacteriano es la más peligrosa y la que genera una mayor carga sociosanitaria. Al contrario de lo que se piensa no es una enfermedad derrotada aún y no todos los tipos están sujetos a vigilancia epidemiológica. Además, algunas bacterias causantes de la meningitis también son proclives a provocar septicemia si alcanzan el torrente circulatorio y afectar a todo el organismo", añade.
Según datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN), cada año se declaran unos 1.000 casos de meningitis en España, de los cuales, un 10 por ciento son muy graves. Cualquier persona puede contraer meningitis, aunque los grupos de mayor riesgo son los niños menores de 5 años, sobre todo cuando los niños no son vacunados, y los jóvenes de entre 15 y 24 años.
De hecho, es la primera causa de muerte por infección en niños y adolescentes. "Los síntomas de la meningitis suelen aparecer de forma brusca y los más habituales son fiebre alta, dolor de cabeza intenso, rigidez en el cuello, náuseas, sensibilidad a la luz y confusión, que pueden progresar rápidamente y requerir atención médica urgente", señala la doctora Marta Guillán.
"Y en los niños, otro de los signos que pueden ser indicativos de esta enfermedad son la aparición de petequias, es decir, de pequeñas manchas de color rojo o morado que normalmente aparecen primero en el torso y, en poco tiempo, se extienden por el resto del cuerpo. En ocasiones el inicio de una meningitis es similar a la de cualquier otra infección y en el caso de las meningitis víricas los síntomas suelen ser leves", añade.
Se pueden dar casos esporádicos de meningitis, como afectar a pequeños grupos, o incluso convertirse en una epidemia, como es común que ocurra en algunos países que no disponen de vacunación o medidas higiénico-sanitarias que protejan a la población vulnerable.
De hecho, la propagación de algunas cepas virulentas a escala mundial ha hecho que en los últimos 20 años cada vez haya más iniciativas para la vigilancia y la prevención de esta enfermedad que, recordemos, puede afectar a personas de todas las edades y en todos los países del mundo.
La meningitis puede dejar secuelas muy graves, entre ellas, pérdida de audición, discapacidad visual y física, disfunciones cognitivas, amputaciones de miembros, a los que se unen las implicaciones emocionales, sociales y económicas para los pacientes y familiares.
"En ocasiones, diagnosticar un caso de meningitis puede resultar complicado debido a que inicialmente puede parecerse a un proceso infeccioso común, especialmente en adolescentes y adultos jóvenes. Por ello, es crucial la vigilancia y la consulta médica inmediata ante la aparición de los primeros síntomas: los casos bacterianos son particularmente severos y pueden ser fatales en cuestión de días si no se tratan adecuadamente", comenta la doctora Marta Guillán.
"Por otra parte, seguir recalcando que la prevención mediante la vacunación es fundamental y altamente efectiva para ciertos tipos de meningitis bacteriana. Muchas de las muertes y de la discapacidad que genera la meningitis se puede prevenir cumpliendo el Calendario Común de Vacunaciones e Inmunizaciones a lo largo de toda la vida (Aprobado por la Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial del SNS para 2024).
La prevención es sin duda tarea de todos: profesionales, pacientes, administraciones y medios de comunicación. Y por ello la SEN junto con distintas asociaciones médicas promueve y colabora en la consecución de un calendario único de vacunaciones en todas las CCAA "para asegurar la equidad en la prevención de la enfermedad", informa Ep.