El Senado exigirá a todos los ministros que justifiquen sus ausencias en las sesiones de control. A través de una iniciativa del PP, que tiene mayoría absoluta, la Cámara Alta va a debatir y votar este martes una moción que insta a los ministros a motivar y dar las razones cada vez que se ausenten en las sesiones de control. No obstante, la intención del PP es ir más allá y ya anunció antes de verano que quiere introducir una reforma en el Reglamento del Senado que obligue por ley a todos los miembros del Gobierno a justificar sus ausencias. Tal y como publicó ayer LA RAZÓN, en 18 sesiones de control que se han celebrado esta legislatura, el Ejecutivo ha notificado 117 ausencias (una media de seis por sesión), pero hay un 30% sin justificar, algo que el PP critica duramente.
En concreto, la moción del PP, que se debatirá en el pleno, incluye cuatro puntos y en el último de ellos dice lo siguiente: «En aras de la transparencia, solicita al Gobierno que, cuando notifique al Senado los miembros del Gobierno que van a ausentarse de las sesiones plenarias, motive también las razones de tales ausencias». Teresa Ribera es la ministra que más ausencias sin justificar ha registrado, con cuatro: le siguen Jose Manuel Albares (3), María Jesús Montero (3), Carlos Cuerpo (3), Isabel Rodríguez (3), Sira Rego (2), Óscar Puente (2), Félix Bolaños (2), Diana Morant (2), Luis Planas (2), Pilar Alegría (2), Ángel Víctor Torres (1), Pablo Bustinduy (1), Ernest Urtasun (1) y Ana Redondo (1).
En el tercer punto de la moción del PP, el Senado también insta al Gobierno a que, «de acuerdo con la lealtad mutua que ha de guiar las relaciones entre los poderes del Estado en un sistema democrático, facilite el control parlamentario ejercido por el Senado reduciendo las ausencias de su presidente y de sus ministros hasta unos niveles razonables». En este sentido, los populares también piden que Sánchez acuda más a menudo a las sesiones de control del Senado ya que en un año (en toda la legislatura), tan solo ha acudido una vez (en marzo).
En el primer punto de la moción, se hace referencia a la Carta Magna: «(El Senado) Recuerda al Gobierno que, de acuerdo con la Constitución, el control de su acción es una de las potestades fundamentales de las Cortes Generales; y que, no obstante, el ejercicio de esta potestad por el Senado se está viendo obstaculizado durante la actual legislatura por el elevado absentismo del Gobierno, tanto de su presidente como del resto de sus miembros, en las sesiones de control del Pleno».
En el segundo punto, se hace alusión a las ausencias del Ejecutivo cuando se convocan sesiones en la Comisión General de las Comunidades Autónomas, que «es un órgano parlamentario concebido, entre sus funciones específicamente territoriales, para favorecer el diálogo y la cooperación multilateral entre el Gobierno y las Comunidades Autónomas»: «Por consiguiente, tanto por razones de lealtad entre los poderes del Estado como de lealtad territorial, el Gobierno no puede seguir ausentándose regularmente de esta Comisión». La Comisión General de las Comunidades Autónomas se ha convocado ya dos veces esta legislatura y una de ellas fue para que los presidentes autonómicos dieran su posición sobre la amnistía, pero ningún miembro del Gobierno acudió.
La moción saldrá adelante porque el PP tiene mayoría, pero está por ver el posicionamiento del resto de grupos del Senado. El PP ya ha introducido una reforma en el Reglamento del Senado para obligar a Pedro Sánchez y a sus ministros a comparecer cuando sean requeridos por la Cámara para evitar que se dilaten en el tiempo y ahora también quiere poner coto a las ausencias en las sesiones de control.
«Las cifras también ponen en evidencia el escaso ánimo de colaboración de este Gobierno en sus relaciones con el poder legislativo y, en concreto, con el Senado», recoge la moción del PP en la exposición de motivos, donde también se reprocha cómo el Gobierno está frenando la potestad legislativa del Senado ya se está neutralizando todas las leyes que se tramitan y llegan al Congreso. En la Cámara Baja, el PSOE tiene el control de la Mesa y puede impedir que avancen hasta su aprobación. Ya van 14 leyes guardadas en el cajón del Congreso pese a que hay once que cuentan con opciones de aprobarse porque Junts se ha abstenido o ha apoyado la toma en consideración.