El ejército ruso se ha anotado este jueves un tanto en el frente de Donetsk al consilidar la toma de la ciudad de Vugledar, considerado un bastión ucraniano en el frente no tanto por su importancia como población, sino porque era un enclave estratégico para el control de la red de suministros de material militar en la ofensiva sobre Ucrania.
El anuncio lo ha realizado el Ministerio de Defensa ruso en un escueto comunicado subido a Telegram en el que asegura que "como resultado de las acciones decididas de las unidades de la agrupación militar Vostok (Oriente) fue liberada la localidad de Vugledar de la república popular de Donetsk".
El día anterior, las fuerzas ucranianas habían ordenado la retirada de la población al entender que estaba perdida, y con el objetivo de evitar bajas en un ejército que no anda precisamente sobrado de reclutas.
La importancia de esta población, que antes de la guerra tenía 14.000 habitantes, radica en que está situada a unos pocos kilómetros de la línea férrea que comunica la ciudad de Donetsk y la península de Crimea, controlados por Rusia, por lo que la consolidación rusa en la zona permitiría abrir una vía de suministro alternativa al puente de Kerch y al transporte marítimo.
La conquista de Vugledar es la mayor victoria militar para el Kremlin desde la toma en febrero de este año de Avdivka, la principal localidad bajo control ucraniano en las afueras de la capital de Donetsk.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, consideró hoy "totalmente correcta" la decisión de retirarse de la ciudad al reunirse en Kiev con el nuevo secretario general de la OTAN, Mark Rutte. "Nuestra gente es mucho más importante que cualquier edificio", aseguró.
Al mismo tiempo, vinculó la pérdida de Vugledar con la imposibilidad de golpear objetivos en territorio ruso con misiles de largo alcance, ante la falta de la luz verde occidental, informa Efe.
No obstante, militares ucranianos comentaron a la televisión que el motivo de la caída de esa ciudad de Donetsk es la acuciante falta de hombres para mantener las posiciones ante el avance ruso que no escatima en bajas en su encarnizada ofensiva.
Vugledar, que tenía antes de la guerra más de 14.000 habitantes, era uno de los principales objetivos de la ofensiva rusa que comenzó en el Donbás en octubre de 2023.
Según la prensa estadounidense, las tropas rusas están tomando territorios a una velocidad que no se veía en el Donbás desde el comienzo de la campaña militar.
En las próximas semanas, pronostican, muy probablemente Ucrania también perderá el control de Pokrovsk, uno de los principales objetivos de la actual ofensiva rusa, entre los que también figura Toretsk.
Con todo, el ejército ruso sigue sin poder expulsar a las tropas ucranianas que penetraron el pasado 6 de agosto en la región de Kursk.