El fútbol no entiende de coherencia. Una vez más, esta frase vuelve a ratificar de que es así. Y es que, fue insólito lo que ocurrió en el Anxo Carro el pasado miércoles durante el Lugo-Sestao River de octavos de final de la Copa Federación. "El linier del encuentro se lesionó en el minuto 24 de partido y, como en esta competición no hay sustituto para los asistentes, tuvo que ser un aficionado que estaba en la grada el que entrara para ejercer sus funciones", informan los medios locales.
Ante la ausencia de efectivos en el cuerpo arbitral, una persona que se encontraba en la grada tuvo que bajar al césped del Anxo Carro para continuar con las funciones del lesionado. Pero no era un aficionado cualquiera, sino el sarriano Jesús López Fernández, colegiado de Segunda RFEF. Hincha del cuadro local.
Hay que matizar que en la Copa Federación no hay cuarto árbitro. Se da la circunstancia de que el hombre en cuestión, Jesús López, es árbitro principal habitual en Segunda Federación, por lo que pudo vestirse de corto y hacer de linier.
Como manda el protocolo, si en un encuentro se lesiona un árbitro y no existe esa figura de un cuarto trencilla, se debe preguntar a través de la megafonía si alguno de los presentes en el estadio cuenta con la licencia para colegiar un choque.