La Sexta Flota de Estados Unidos, con base en Bahrein, está siendo clave en la disuasión y derribo de los misiles iraníes contra Israel. Dos de sus destructores, el USS Cole y USS Bulkeley, se mantienen en estado de alerta ante la posibilidad de nuevos ataques desde Teherán. Durante la ofensiva contra Tel Aviv y Jerusalén el pasado martes, los dos buques de la Armada estadounidense interceptaron con éxito misiles balísticos y drones iraníes.
El impactante vídeo publicado por la Marina de Estados Unidos muestra los lanzamientos de misiles desde el USS Bulkeley para neutralizar las amenazas del mar Mediterráneo oriental. Ambos buques están equipados con el sistema de defensa antimisiles balísticos Aegis, diseñado específicamente para interceptar y destruir misiles y drones. Esta última acción defensiva subraya la estrecha cooperación militar entre Estados Unidos e Israel, en particular durante períodos de mayor tensión.
Los destructores lanzaron alrededor de una docena de proyectiles contra los misiles iraníes, según el general de la Fuerza Aérea Pat Ryder, el portavoz del Pentágono, quien no aclaró si se trataba de interceptores de misiles antibalísticos Standard Missile-3.
Irán lanzó unos 200 misiles contra Israel. Aunque la mayoría fueron interceptados, hubo varios que alcanzaron sus objetivos, incluida la base aérea de Tel Nof, al sur de Tel Aviv, donde se encuentran los aviones de combate israelíes, incluidos los cazas F-15C/D.
El USS Bulkekey y el USS Cole son destructores de misiles guiados de clase Arleigh Burke. El primer destructor de la clase Arleigh Burke fue desarrollado en los años ochenta, en plena Guerra Fría; uno de sus mejores exponentes es el USS Benfold, convertido ahora en una pieza clave en la estrategia de la US Navy para la disuasión contra China. Desplazan unas 9.000 toneladas con carga completa y tiene una longitud de 153 metros. Estos destructores habían sido posicionados previamente en la región para garantizar la seguridad de sus aliados en medio de una gran inestabilidad regional.