El crédito concedido a las familias bajó en 2.455 millones en agosto, un 0,36% en tasa interanual, para situar el total en 682.844 millones de euros, a pesar de que la financiación al consumo aumentó en el mismo periodo un 5,9%, hasta los 102.902 millones de euros. La causa hay que buscarla en la caída de los préstamos hipotecarios, que bajó un 0,7% respecto a agosto de 2023, hasta 496.167 millones. En el caso de las empresas, la necesidad de financiación también se ha acentuado, tras crecer un 0,67% (6.090 millones de euros), hasta alcanzar los 931.037 millones, aunque redujo respecto a julio un 0,58%, en línea con los hogares, cuyo endeudamiento cayó en 313 millones de euros en agosto en relación a julio, lo que supone un 0,05% menos.
Los créditos hipotecarios de los hogares continúan representando la mayor parte del total de su deuda, el 73% del total. Suman 496.167 millones, que suponen 3.350 millones menos que un año antes, una caída del 0,7%. No se han comportado igual los créditos destinados al consumo, que crecieron casi un 6% en el último año, hasta los 102.902 millones, mientras que los préstamos de las familias destinados a otros fines alcanzaron los 80.448 millones de euros, por debajo de los 85.295 millones de un año antes.
En cuanto a la financiación a las empresas, en agosto se incrementaron en tasa interanual por el crecimiento de los préstamos del exterior y de los valores representativos de deuda, mientras que los créditos de las entidades financieras experimentaron un descenso en el octavo mes de 2024. Estos préstamos bancarios se situaron en 454.236 millones de euros en agosto, lo que supone un descenso del 1,7% respecto al mismo mes de 2023, mientras que los valores representativos de deuda subieron un 7,3%, hasta los 137.024 millones, y los préstamos del exterior crecieron un 1,3% interanual, hasta los 339.777 millones.