No hay aparición de la Reina Letizia que no nos sirva de inspiración y su look en Vilagarcía de Arousa es un nuevo ejemplo de cómo combina elegancia y sencillez en cada una de sus apariciones públicas. Tras habernos sorprendido la noche anterior en Marín, donde apostó por unos básicos otoñales que todas deberíamos tener en el armario, ayer volvió a deslumbrar con un estilismo más relajado pero igual de impecable en una comida familiar en el restaurante O Loxe Mareiro. Letizia sigue demostrando, una vez más, que tiene la habilidad única de convertir cualquier ocasión, por más informal que sea, en una auténtica lección de estilo.
Después de haber brillado en un evento más formal en Marín, donde acompañó a su hija, la Princesa Leonor, en un acto de la Escuela Naval, la Reina decidió apostar por un look cómodo y funcional, pero sin perder ni un ápice de su elegancia. En esta ocasión, Letizia estrenó unos vaqueros flare deshilachados de Mango, una elección que no pasa desapercibida y que nos transporta directamente a los años setenta, una de las décadas que más influencia sigue teniendo en las tendencias actuales. Los vaqueros, con ese corte acampanado, no solo son favorecedores, sino que además aportan un aire desenfadado y juvenil al look.
Jeans fiona flare de tiro medio, de Mango (29,99 euros)
La Reina combinó estos vaqueros con una blusa blanca de &OtherStories adornada con delicados bordados florales. Las mangas abullonadas y los detalles en relieve de la blusa aportaban ese toque romántico y femenino que tanto nos gusta, equilibrando a la perfección el estilo casual de los jeans. Es precisamente este tipo de prendas lo que demuestra el buen ojo de la Reina para elegir básicos que nunca pasan de moda, pero con un giro moderno que los hace destacar.
Voluminous floral appliqué blouse, de &Otherstories (89 euros)
Sin embargo, lo que más llamó la atención de su look fue la capacidad de Letizia para reutilizar algunas de las piezas que ya le habíamos visto la noche anterior en Marín. Tanto la gabardina beige de Burberry como los mocasines negros, que fueron protagonistas de su estilismo anterior, volvieron a aparecer en este conjunto, demostrando que la Reina no duda en repetir prendas clave cuando se trata de versatilidad. La gabardina es un básico que nunca falla y que añade ese toque de elegancia clásica, mientras que los mocasines aportan comodidad sin sacrificar el estilo.
Para completar su look, Letizia añadió un bolso trenzado de Mango, que proporcionaba una textura interesante y actual al conjunto. Además, una joyitas minimalistas no podían faltar: la Reina optó por unos pendientes dorados de bambú y un anillo de Coreterno, en línea con su estilo. Estos pequeños detalles fueron los encargados de cerrar un look que, aunque informal, estaba perfectamente cuidado y pensado al milímetro.
Una vez más, la Reina Letizia nos enseña que no es necesario recurrir siempre a nuevos estilismos para destacar. Su habilidad para reutilizar prendas de manera estratégica y su buen gusto a la hora de combinarlas, la consolidan como un referente de moda, no solo en España, sino a nivel internacional. Tanto si se trata de un evento formal como de una comida familiar, Letizia sabe cómo mantenerse fiel a su estilo y, al mismo tiempo, marcar tendencia. Este look es la prueba de que, cuando se trata de moda, la Reina nunca decepciona, y su capacidad para convertir lo cotidiano en extraordinario es lo que la hace tan admirada por miles de personas.