La segunda parte de la temporada de Fórmula 1, a la vuelta de las vacaciones, arrancó con la sensación de que McLaren y Norris podían llegar a luchar por el título contra Verstappen y Red Bull. El británico ganó en Países Bajos y una semana después arrojó dudas cn un cuarto puesto en Monza en la que ni su compañero ni su equipo le ayudaron. Aun así, le sacó unos cuantos puntos a su rival para seguir luchando.
Pero hoy, en Azerbaiyán, ha vuelto a demostrar que, quizá, todavía le queda mucho para pelear realmente por un campeonato del mundo. Un error de conducción en la última vuelta de la primera fase y, en menor medida, la decisión de sus ingenieros de salir con neumático usado, le condenaron a salir mañana desde la 17º posición. El inglés tendrá que remontar y estar muy atento a los cambios que se puedan producir en la carrera, ya que Baku es un escenario donde las actuaciones del coche de seguridad son habituales. Es un trazado muy rápido y estrecho en algunas zonas y eso provoca muchas neutralizaciones. El objetivo de Norris mañana será minimizar daños e intentar alcanzar a Verstappen para restarle el mayor número de puntos posibles.
Los que están completamente al alza son Leclerc y Ferrari. Vienen de ganar en Italia y hoy han vuelto a conseguir la “pole” y se colocan como máximos favoritos a la victoria mañana. Se les coló entre medias Oscar Piastri, mientras que la tercera plaza fue para Sainz, que desaprovechó una nueva oportunidad para brillar con un coche muy competitivo.
Pérez fue cuarto por delante de Russell, Verstappen, Hamilton y Alonso, que se marcó un vueltón estratosférico para ser octavo. No se puede hacer nada más con el Aston Martin.
La carrera empezará mañana a las 13:00h.
