La Guardia Civil ha desarticulado una organización criminal dedicada al comercio ilegal de gases fluorados. Estos gases, provenientes de China, habrían sido introducidos en España evadiendo el sistema de cuotas y el correspondiente impuesto nacional. En el marco de esta operación, denominada "GASCRA", se han detenido a 5 personas y otras doce personas se hallan investigadas por este comercio ilegal, todas ellas de origen ruso y ucraniano.
Según informó el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de Barcelona en un comunicado emitido este martes, la investigación se inició tras detectar la venta de gases refrigerantes hidrofluorocarburos (conocidos como gases fluorados o de efecto invernadero) a través de plataformas en línea desde 2019, a precios significativamente inferiores a los del mercado, generando así grandes beneficios.
Las indagaciones revelaron que estos gases se fabricaban en China a un costo de entre 20 y 50 euros por botella. Posteriormente, una empresa polaca los introducía ilegalmente en la Unión Europea, para ser distribuidos en España a través de internet por un precio mínimo de 300 euros por botella.
Durante la operación, la Guardia Civil realizó registros en una vivienda en Barcelona y en una nave industrial en Madrid, incautando más de 700 botellas de gas almacenadas sin las debidas medidas de seguridad y manejadas por personal no capacitado. El valor estimado de estas botellas ascendía a 240.000 euros.
El lucrativo mercado negro asociado al tráfico ilegal de gases refrigerantes en Europa constituye un fenómeno delictivo en auge, que conlleva además un riesgo grave de contaminación atmosférica. La investigación sigue en curso y no se descartan más arrestos.
