Rafa Mir, jugador del Valencia CF, se encuentra en libertad con medidas cautelares tras ser denunciado por un presunto caso de agresión sexual. Los hechos, que habrían ocurrido en su vivienda tras una noche de fiesta Según la denuncia, dos jóvenes se habrían encontrado con Mir en una de una discoteca, y lo que parecía una noche de diversión habría terminado en una acusación grave.
Uno de los puntos más controvertidos del caso es el testimonio de una de las jóvenes, quien habría presentado signos de violencia. Según los informes, la mujer apareció con sangre. Según el periódico Levante, Rafa Mir, sin embargo, ha reconocido ante la jueza que la joven tenía una herida, pero ha defendido que se trataba de un arañazo menor y no de una señal de violencia grave. “Vi la sangre, era un arañazo nada más.
Además, el jugador insiste en que el sexo fue consensuado en todo momento y que no hubo ningún tipo de agresión o coerción. Este punto resulta crucial para su defensa, ya que la percepción de lo ocurrido depende en gran medida de si el acto fue o no consensuado, una cuestión que será difícil de esclarecer sin pruebas concluyentes. La defensa del futbolista ha centrado sus esfuerzos en desacreditar la investigación de la Guardia Civil, alegando que es "sesgada y unidireccional".
Según ellos, las pruebas recogidas por los investigadores estarían orientadas hacia una única interpretación de los hechos, lo que impide ver la situación desde una perspectiva más amplia. Para ello, han solicitado la declaración de los agentes de la Policía Local que acudieron a la vivienda de Mir, con el objetivo de aclarar lo que realmente ocurrió aquella noche. En este sentido, la defensa considera que los informes policiales podrían jugar un papel clave a la hora de determinar la inocencia o culpabilidad del jugador.
Uno de los aspectos que más ha llamado la atención es que, según la versión de la defensa, la joven habría declarado inicialmente que se retiró al baño con Mir de forma consentida. Esto sería un punto a favor del jugador, ya que indicaría que en un primer momento ambos estaban de acuerdo con lo que sucedió. La defensa sostiene que cuando la joven pidió que Mir detuviera el acto, él lo hizo inmediatamente, mostrando que no hubo una agresión.del futbolista.
