Una vez más, el Kremlin ha vuelto a advertir a Washington de que no cruce una “línea roja” entregando a Ucrania misiles de largo alcance. La Casa Blanca estaría cerca de llegar a un acuerdo con Kiev que permitiría a las tropas de Volodimir Zelenski recibir misiles aire-tierra conjuntos (JASSM), capaces de alcanzar objetivos en el interior de Rusia, según fuentes oficiales del Pentágono citadas por algunos medios estadounidenses.
Los misiles Jassm tienen un alcance de unas 370 kilómetros. EEUU aprobó el año pasado la transferencia de los misiles Atacms, que tienen un alcance de unas 300 kilómetros. Rusia ha advertido en varias ocasiones de que el suministro de misiles de largo alcance a Ucrania violaría sus líneas rojas ya que ello supondría, dice,una escalada del conflicto. Por ello, los aliados de Ucrania se han mostrado reacios a suministrarlos y, cuando lo han hecho, han puesto como condición a Kiev de que no los use contra objetivos rusos.
El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, ha dicho que no le sorprendería que Estados Unidos ceda a la demanda de armas de Ucrania, y agregó que Zelenski está "incitando" a Occidente. "Deberían entender que aquí están bromeando sobre nuestras líneas rojas. No deberían hacerlo", advirtió Lavrov.
Los misiles aire-superficie de largo alcance AGM-158 (JASSM) podrían llegar a Ucrania las próximas semanas. Si bien el JASSM es más avanzado que cualquier arma de largo alcance en el inventario de Ucrania y proporcionaría capacidades mejoradas, su mayor virtud es que el gobierno estadounidense podría suministrar un flujo constante de armas.
Hace meses, un funcionario de alto rango de EEUU dijo que los cazas F-16 Viper donados a Ucrania contarían con un misil avanzado de distancia de seguridad con un alcance de entre 300 y 500 kilómetros.
La Fuerza Aérea de Ucrania emplea actualmente como principal medio de ataque aéreo los misiles de crucero Storm Shadow y SCALP-EG, casi idénticos, donados por Reino Unido y Francia, respectivamente. Ambos tipos son disparados por los Su-24 Fencers ucranianos. Aparte de los misiles balísticos ATACMS donados por Estados Unidos y los misiles de crucero Neptune desarrollados en Ucrania, estas armas representan el extremo superior de las capacidades de ataque de precisión de largo alcance de Ucrania.