Ajenos a todo el revuelo que está generando el pacto rubricado entre el PSC y ERC para lograr investir a Salvador Illa, el Gobierno respalda abiertamente la activación de una financiación singular para Cataluña. "El acuerdo se va a cumplir", ha resuelto hoy la portavoz gubernamental, Pilar Alegría, obviando el malestar generado en el seno de su propio partido y las críticas que también resuenan desde los territorios gobernados por el PP.
La orden que ha dado Pedro Sánchez a los suyos es hacer "pedagogía" para tratar de aplacar la rebelión autonómica que se sostiene desde hace semanas, por ello, Alegría se ha afanado en "asegurar que mejorar la financiación de un territorio en absoluto va en detrimento del resto". En este sentido, la portavoz gubernamental ha emplazado a abordar la cuestión con "un debate sereno y sosegado". Asimismo, ha insistido en llamar a la calma, para intentar desactivar el discurso del PP, que ya está calando en algunas autonomías de signo socialista: "Desde luego, mejorar el sistema de financiación no es para que unas ganen en detrimento de otras. En absoluto", ha sentenciado.
En este punto, la portavoz ha criticado al principal partido de la oposición por utilizar "la confrontación territorial" con fines partidistas y electorales, obviando que estas suspicacias no se limitan únicamente a las regiones del PP, sino que hay dirigentes socialistas que tampoco comparten el acuerdo suscrito con los independentistas. Alegría ha vuelto a reiterar que mejorar la financiación de Cataluña en ningún caso perjudicará al resto de las comunidades autónomas del régimen general.
En este sentido, desde el Gobierno insisten en el argumentario oficial, reseñando que la igualdad y la cohesión territorial siempre han sido los principios que guían al Ejecutivo y que, desde que Pedro Sánchez llegó a la Moncloa en el 2018, se han transferido al conjunto de las comunidades autónomas 300.000 millones de euros más que durante los siete años de mandatos de Mariano Rajoy. Por ello, Alegría ha reclamado al PP una oposición "constructiva y responsable". "La política destructiva de generar confrontación territorial nunca lleva a buen puerto", ha alertado.