No os lo vamos a negar, no estamos llevando bien este lunes de vuelta a la oficina, pero con una camisa blanca todo es mejor. Y sino que se lo digan a la Infanta Cristina en la boda de Victoria López-Quesada. Era una de las bodas más esperadas del año, y aunque el sábado solo pudimos ver rápida imágenes de los invitados entrando en coche, ahora por fin se ha desvelado el secreto mejor guardado, el vestido de la novia. Victoria López-Quesada, hija de Pedro López-Quesada y Cristina de Borbón-Dos Sicilias se ha casado con el aristócrata y empresario Enrique Moreno de la Cova.
En las fotos oficiales difundidas por Casa Real, la novia y su familia han posado con Felipe VI en dos de ellas para tener un recuerdo imborrable de esta fecha. En una de estas imágenes, donde está el Rey Felipe que es la más poblada de todas, ahí se encuentran también su madre, la Reina Sofía, y sus hermanas, las Infantas Elena y Cristina. Las tres están sentadas mirando a cámara, mientras que los novios ocupan ya el centro del encuadre frente al resto de sus familiares. Y nosotras solo nos hemos podido fijar en el look de invitada perfecta de la Infanta Cristina con la eterna camisa blanca y falda de vuelo estampada. Sí, esa camisa blanca que nosotras vamos a llevar a la vuelta a la oficina.
El fondo de armario de las mujeres elegantes
“En caso de duda, todo queda bien con una camisa blanca”, lo Victoria Beckham, y nosotras lo que diga a ella lo cumplimos a rajatabla. Por algo es una de las mujeres que marca la moda mundial en la actualidad. Esta pieza, la camisa de algodón de color blanco, es quizás la prenda más universal que todas las chicas y mujeres tenemos en nuestro armario, sea cual sea nuestro estilo. Por eso, la Infanta Cristina no ha dudado en lucirla en una boda y nosotras la vamos a llevar en nuestra vuelta a la oficina.
La camisa blanca es una prenda que hay que tener, está en todas partes, todo el año y, sobre todo, está en toda la moda indistintamente de la temporada o del año. Desde para ir a la oficina como para asistir a una cena con tu grupo de amigas. Indiscutiblemente, estamos hablando de la prenda infalible que siempre ha existido en nuestros armarios. Asimismo, se puede jugar con su patrón de diversas maneras, utilizándola como sobrecamisa o haciéndole un nudo para copiar los clásicos looks de Rachel Green en los años 90.