Cuando en junio se conoció el dato, no nos lo creíamos: más de la mitad de los jóvenes de entre 18 y 27 años todavía vive con sus padres al no poder permitirse alquilar un piso y, mucho menos, una hipoteca. Independizarse es una tarea cada vez más complicada para los españoles por la tendencia al alza del precio de la vivienda, tanto en la compra como en el alquiler, que ya ha superado la barrera de los 1.000 euros: en julio, el alquiler medio de un piso de 90 metros cuadrados se situaba en 1.062,90 euros, un 8,5% más que en el mismo periodo del año anterior, revelan desde el portal inmobiliario pisos.com.
La cuestión es que, en algunas comunidades autónomas, concretamente en Baleares, Madrid, Cataluña y Canarias, los jóvenes destinan la totalidad de su salario al alquiler de una vivienda. La realidad es que el salario medio de una persona joven en España en el último semestre del año pasado fue de 1.050,77 euros netos al mes, lo que supone una deuda mensual de 12,13 euros tras el pago de la renta, considerando que el alquiler medio en nuestro país está en 1.062,90 euros.
En las comunidades mencionadas, la situación es aún peor, ya que en Baleares el alquiler se sitúa en 1.615,35 euros, lo que supone un exceso de 564,58 euros respecto al salario medio; en Madrid, con 1.556,34 euros, el balance es de 505,57 euros de deuda; en Cataluña, con 1.190,70 euros, existe un déficit de 139,93 euros; y en las Islas Canarias, con 1.149,30 euros, supone una deuda de 98,53 respecto al salario medio.
El problema de la emancipación es cada vez más acusado en nuestro país y deja a los jóvenes en una situación "muy delicada" al no poder adquirir ni una vivienda en propiedad ni una residencia de alquiler, algo que "antes era mucho más sencillo", señala el director de estudios de pisos.com, Ferran Font.
La situación tampoco es mejor en el resto de comunidades, ya que, aunque el pago de la renta quedaría cubierto, dejaría muy poco margen para pagar los suministros básicos. Según pisos.com, en Cantabria “sobrarían” 139,68 euros, con lo que se tendrían que asumir los gastos de luz, agua, gas e Internet, mientras que en la Comunidad Valenciana y el País Vasco, con alquileres medios de 901,80 y 888,20 euros respectivamente, dejarían poco más de 150 para otros gastos, una situación insostenible y cada vez más agobiante.
“Viendo todos estos condicionantes no es de extrañar que cada vez sean más las personas que se ven obligadas a compartir piso, pues el nivel de salarios actual no corresponde en absoluto con los precios de la vivienda, cuya tendencia alcista no parece que se vaya a detener pronto”, sentencia Font.
En contraposición a lo expuesto, existen 10 comunidades autónomas con una renta mensual mucho más asequible –entre los 250 y los 660 euros– en relación con los salarios. Estas son: Aragón, Andalucía, Murcia, Castilla-La Mancha, Asturias, Navarra, Galicia, Extremadura, Castilla y León y La Rioja.
Según datos de Eurostat, la edad media de independización en España se sitúa en los 30,4 años, la cuarta más elevada de la Unión Europea –solo por detrás de Grecia, Croacia y Eslovaquia– y muy alejada de la media comunitaria de 26,3 años. El problema viene cuando descubrimos que la tasa de emancipación en el segundo semestre de 2023 era solo del 17% o, lo que es lo mismo, ocho de cada diez jóvenes españoles todavía no se han marchado de casa, según datos del último Observatorio de la Emancipación publicados por el Consejo de la Juventud de España.
