Las autoridades alemanas han conminado a abandonar el país al exdirector del Centro Islámico de Hamburgo (IZH), prohibido el mes pasado por tratarse de [[LINK:INTERNO|||Article|||66c4e70e63e6b0e4baa4413c|||una «organización islamista extremista»]] y por apoyar supuestamente al grupo chií libanés Hizbulá.
«Como representante religioso supremo del régimen en Teherán, que desprecia los derechos humanos, su tiempo en Alemania ha terminado», reza un escrito de las autoridades de Hamburgo dirigido al exresponsable de la institución, Mohammed Hadi Mofatteh, citado por varios medios. «Seguiremos impulsando la lucha contra el extremismo islámico con toda dureza y agotaremos para ello todos los recursos del derecho de extranjería», continúa la misiva.
Las autoridades de Hamburgo instaron a Mofatteh a abandonar el país en un plazo de 14 días o a arriesgarse a ser deportado. Según los medios, Mofatteh dirigía el IZH desde verano de 2018 y, según los servicios secretos, era hasta la disolución de la organización el representante oficial del ayatolá Alí Jamenei en Alemania.
El Ministerio del Interior de Alemania prohibió en julio el IZH y sus suborganizaciones a escala nacional tras considerarla una «organización islamista extremista» que persigue objetivos anticonstitucionales, especialmente por su supuesto apoyo a Hizbulá.
Las fuerzas de seguridad llevaron a cabo registros en 53 propiedades de ocho estados federales (Hamburgo, Bremen, Berlín, Baja Sajonia, Mecklemburgo-Pomerania Occidental, Hesse, Renania del Norte-Westfalia y Baviera) e incautaron entre otros libros y documentación relacionada con Hizbulá y Hamás, dos organizaciones prohibidas en Alemania, según el Ministerio.
La reacción de Teherán fue prohibir dos institutos relacionados con el Gobierno alemán en la capital iraní, lo que llevó al Ministerio de Exteriores germano a convocar al embajador para protestar.
