El PP ha criticado lo "mezquino" de que el presidente del Gobierno pretenda "cargarle el muerto" de las supuestas comisiones ilegales en el seno de su Gobierno que se investigan en el "caso Koldo" a un hombre: José Luis Ábalos.
Miguel Tellado, portavoz popular en el Congreso, le ha recordado directamente a Pedro Sánchez que el exministro de Transportes era "su mano derecha" en el PSOE como secretario de Organización y muy cerca en las tareas de gobierno como negociador de la investidura y responsable de la relación de Ferraz con el propio Ejecutivo.
"No cuela", por ello, que sea él único o el último responsable de las presuntas irregularidades en la compra de mascarillas que se investigan en la Audiencia Nacional.
"Si por algo se ha caracterizado durante estos años José Luis Ábalos, es por ser el mejor cumplidor de las órdenes y de los recados de Sánchez", defendió, deslizando el papel que Sánchez en todo el presunto escándalo de corrupción.
La auditoría interna sobre las cuestionadas adjudicaciones que encargó su sucesor, Óscar Puente, es para Génova una muestra ineludible de que "sí hay caso" y "si no, no se entenderían los últimos ceses", en alusión a las salidas que en su equipo impuso el actual titular de Transportes.
La de los ya exalto cargos del Ministerio imputados en "Koldo", el que fuera subsecretario José Manuel Gómez y el hasta hace poco director de personal de Adif, Michaux Miranda.
Una estrategia, la de intentar imputar toda responsabilidad en las supuestas 'mordidas', que sirve al único propósito, denunció Tellado, de "levantar un cortafuegos alrededor" de Pedro Sánchez para intentar que no le acabe salpicando lo que se investiga en el "caso Koldo".
La auditoría, pese a estar concebida para "señalar únicamente la responsabilidad" del ahora diputado no adscrito, está en sus conclusiones "señalando a Sánchez" dado que, expuso citando al informe, "varias decisiones que, dice el informe, no fueron justificadas por los servicios jurídicos y administrativos del Ministerio"
La principal: que la auditoría recoge "la adaptación del primer encargo de mascarillas a las necesidades de la empresa Soluciones de Gestión, lo que llevó a duplicarlo" de cuatro a ocho millones en menos de 40 minutos.
O también la elección de esa empresa "para el segundo encargo de mascarillas del Ministerio, a pesar de no haber cumplido correctamente con el primer encargo y a pesar de existir otra oferta mejor".
El informe asegura que la indicación provino directamente del gabinete del ministro, sin participación de los equipos técnicos y así "se constata que la indicación vino, cuando menos de Ábalos, pero lo que nos aclara es que si nació en él o si fue recibida desde una instancia superior
Para Tellado el presidente del Gobierno tiene el deber de "aclarar si Ábalos estaba, como siempre, cumpliendo sus órdenes, o si fue la primera y única iniciativa propia de su vida política". No descartan y prácticamente se temen los populares que sea el primer extremo el que concuerden con la realidad de lo que pasó.
El documento deja claro, de igual forma, dijo el portavoz, que había una persona ajena al Ministerio "que recibía copias de todos los correos electrónicos, que accedía habitualmente a la sede del ministerio, que estaba presente en las llamadas telefónicas y que negociaba esos contratos en nombre del ministro".
Este es Víctor de Aldama, señalado como el supuesto "conseguidor" en el "caso Koldo", que tenía, dijo Tellado, negocios no solo con Koldo, sino también con Begoña Gómez", aludió por el hecho de que la exdirectora de Wakalua, Leticia Lauffer, admitió en comisión que estaba este empresario el día que conocieron Hidalgo y ella a la mujer de Sánchez.
"Es muy difícil pensar que Ábalos y Aldama, los socios respectivos de Pedro Sánchez y de Begoña Gómez, tramasen esto en solitario", opinó.
Resulta, además, paradójico y "curioso" para los de Feijóo que quiera ahora el entorno del también líder del PSOE señalar como corrupto a la misma persona "que presentó en el Congreso la moción de censura contra la corrupción, que decían ellos" y que le permitió acceder a la Moncloa.
