Tambores de guerra en Renfe. El Comité General de Empresa de la operadora pública ferroviaria, del que forman parte Semaf, CC OO, UGT, SCF, CGT y SF; ha solicitado la constitución de una comisión de conflictos laborales en protesta por los pasos dados por el Ministerio de Transportes y la Generalitat para el traspaso de la gestión integral de los servicios de Cercanías de esta comunidad, Rodalies, al Gobierno autonómico.
Los sindicatos, que aseguran que han solicitado esta comisión como intento de solución previo a las posibles huelgas que serían convocadas en caso de no alcanzar un acuerdo, aseguran que el Ejecutivo ha incumplido los acuerdos que alcanzaron el 23 de noviembre de 2023 para desconvocar la huelga que habían convocado entonces en protesta por el traspaso de Rodalies.
Los representantes de los trabajadores denuncian que aunque tanto la Generalitat como el Gobierno les han transmitido que no había avances significativos en este proceso, el pasado 18 de julio, el Ejecutivo catalán, a través de un comunicado, anunció que el 1 de enero de 2025 se les traspasaría la gestión de la línea R1 y en diciembre, la de la R2 y la R3 tras alcanzar un acuerdo con Transportes. De igual forma, añaden los sindicatos, se comunicó que el servicio operativo sería prestado por una compañía diferente a Renfe.
De estos acuerdos, dicen los sindicatos, que suponen cambios sustanciales tanto en la operación como en la infraestructura, "no ha tenido conocimiento ni participación" la representación de los trabajadores de Renfe.
Los sindicatos denuncian, además, que el acuerdo alcanzado por Renfe para dar entrada en su división de mercancías a MSC supone "una privatización encubierta" que también incumple los acuerdos.
En noviembre pasado, recién llegado Óscar Puente al ministerio, Transportes alcanzó un acuerdo con los sindicatos para desconvocar la huelga entonces prevista por el traspaso de Rodalies. El acuerdo alcanzado respondía "al compromiso expresado por el ministro Óscar Puente de garantizar que los representantes de los trabajadores de Renfe y Adif formen parte de las negociaciones y de respetar y salvaguardar en todo momento los derechos socio-laborales y de permeabilidad de todos los empleados de ambas empresas públicas", así como la garantía de integridad de los Grupos Adif y Renfe, manteniendo sus plantillas y operación, tanto para el proceso de Renfe Mercancías como para Rodalies, según explicó el departamento.
