De nuevo un selfie ha acabado en tragedia. El 15 de agosto de 2024, la vida de Natalie Stichova, una talentosa gimnasta checa de 23 años, se vio trágicamente truncada en un devastador accidente en la montaña Tegelberg en Baviera, Alemania. Stichova, conocida por su amor por las aventuras al aire libre, estaba visitando el famoso castillo de Neuschwanstein (conocido popularmente como el "Castillo de la Bella Durmiente") con sus amigos cuando ocurrió el terrible accidente.
El monte Tegelberg es un destino popular para los amantes de las actividades al aire libre, ya que ofrece vistas impresionantes de los Alpes bávaros y el paisaje circundante. La montaña, que se eleva a más de 1.700 metros, es famosa por sus escarpadas y desafiantes rutas de senderismo y su belleza paisajística. En la base de la montaña se encuentra el castillo de Neuschwanstein, uno de los monumentos más emblemáticos de Alemania. Construido en el siglo XIX, el castillo se ha convertido en un símbolo de la arquitectura de cuento de hadas en La Bella Durmiente y atrae a millones de visitantes cada año.
Stichova y sus compañeros estaban de excursión, disfrutando del pintoresco entorno de la montaña Tegelberg. Mientras intentaba hacerse un selfie cerca del borde de la montaña para capturar el majestuoso Castillo de Neuschwanstein al fondo, Stichova perdió trágicamente el equilibrio. No está claro si se resbaló o si un trozo de la cornisa rocosa cedió bajo ella, pero el resultado fue una catastrófica caída de aproximadamente 80 metros.
Los servicios de emergencia acudieron rápidamente al lugar y Stichova fue trasladada en helicóptero a un hospital cercano. A pesar de los esfuerzos de los profesionales médicos, las lesiones que sufrió fueron graves. Después de seis días en estado crítico, durante los cuales permaneció con soporte vital, su familia tomó la desgarradora decisión de no alargar su vida. Stichova falleció el 21 de agosto de 2024 según han dado a conocer ahora sus familiares.
Según el Daily Mail, una amiga de la fallecida relató cómo Stichova buscaba el mejor plano para su selfi cuando ocurrió el trágico accidente. “Natalie se situó muy cerca del borde de la montaña para obtener el mejor plano de la imagen del castillo cuando resbaló y se precipitó ladera abajo”, informa el medio británico citando a la testigo anónima.
La trágica muerte de Natalie Stichova ha vuelto a llamar la atención sobre los peligros de intentar hacerse selfies arriesgados, en particular en lugares precarios y de gran altitud. El monte Tegelberg, aunque es un destino turístico popular, es conocido por recibir a los turistas con su terreno accidentado y sus acantilados escarpados, lo que lo convierte en un lugar donde la precaución es primordial frente a la tecnología. Las autoridades suelen aconsejar a los visitantes que se mantengan alerta y prioricen la seguridad, especialmente en áreas donde la belleza natural puede distraer fácilmente de los riesgos inherentes.
Su muerte ha provocado una gran consternación en la República Checa. Su club de gimnasia, Sokol Pribram, expresó su profundo pesar en un comunicado, recordándola como una persona vibrante y alegre que repartía sonrisas dondequiera que iba. Se ha organizado una vigilia para honrar su memoria.
