Siguen llevándose, aunque los tatuajes parecen estar ganando la batalla. Sin embargo, hubo una época que era raro el que no llevara uno en el cuerpo. Hablamos de los 'piercings', concretamente los faciales y el famoso pendiente en el ombligo. El 'piercing' en el ombligo ha mantenido su popularidad a lo largo de los años, aunque su auge máximo se dio entre los años 90 y 2010. En la actualidad, sigue siendo una opción popular, especialmente entre jóvenes. Sin embargo, su popularidad no es tan masiva como lo fue en el pasado. ¿Y qué pasa ahora? Pues que muchas nos hemos cansado de llevarlo, nos lo quitamos en su día, se cerró y ahora vivimos con la marca.
No es que sea un complejo, ni mucho menos, sabíamos que el pendiente se hacía agujereando la piel y que mientras te atraviesan no sientes precisamente cosquillas, pero nos hemos cansado y queremos disimularlo. Si es así, conviene saber que hay un procedimento.
La respuesta es sí y el proceso es bastante fácil y rápido, pero debe hacerlo un profesional. La reparación de los agujeros del 'piercing' se puede aplicar a muchas partes del cuerpo donde se puede llevar un pendiente, ya sea la nariz, el labio, la ceja, el pezón, etc. "Consiste en hacer una incisión para extirpar el canal de piel que recubre el orificio por el interior y suturar para reestablecer la continuidad de los tejidos. El tipo de punto de sutura es el que se utiliza en la cirugía infantil, para dejar una señal imperceptible. Esta técnica también se puede emplear para reducir la dimensión del lóbulo, reconstruir uno rasgado o incluso disminuir el tamaño de la oreja. La intervención se personaliza en función de la zona (ombligo, oreja, lengua, etc) y el tipo de marca a eliminar", explican desde la web de la Clínica Ibiza.
Desde el portal web de expertos en cirugía y medicina estética destacan que es un procedimiento ambulatorio, indolora y dura unos 30 minutos: "Se aplica anestesia local para que el paciente no sienta ninguna molestia. En algunos casos, hay que utilizar una tirita para evitar el contacto con el aire. Se realiza un seguimiento del proceso de cicatrización para evitar infecciones y normalmente, a los 10 o 15 días se retiran los puntos".
También se puede quitar con láser. Se realiza de manera ambulatoria y es indolora, no obstante, no todos los agujeros pueden ser cerrados con láser, será necesaria una valoración médica personalizada. Otras veces, se combinan. Se hace el primer procedimiento y, luego, si queda alguna cicatriz superficial, se aplica el láser, como explica la protagonista del canal de TikTok PineappleModa.
Eso sí, barato no es. Cuesta bastante más de lo que te costó hacértelo. El tratamiento para cerrar un agujero de 'piercing' tiene un precio a partir de 400 euros. Dependerá de la zona a tratar, el tipo de agujero o cicatriz y la técnica específica que se precise en cada caso, así como la clínica en cuestión en la que te lo hagan. Si no quieres pasar por este procedimiento, siempre puedes hacer un tatuaje encima para disimularlo. Aunque, a ver si va a ser peor el remedio que la enfermedad, que luego para disimular el tatuaje la cosa se complica más.
