Con la llegada del verano, aumentan las temperaturas y la actividad de insectos que pueden poner en riesgo nuestra salud.
Mosquitos, transmisores de enfermedades como el dengue, y avispas y abejas, con sus dolorosas picaduras, son los principales enemigos. Es fundamental estar informado sobre cuáles son estos insectos y cómo prevenir sus picaduras o mordeduras. Abordamos dos de los insectos más comunes y peligrosos durante la temporada estival, proporcionando información detallada sobre sus características, los riesgos que implican y las medidas preventivas que se pueden tomar para evitar problemas.
Los mosquitos son, sin duda, uno de los insectos más molestos y peligrosos del verano. Además de causar picaduras que provocan picazón y molestias, son vectores de enfermedades graves como el dengue, el zika y la malaria. Los mosquitos hembra son los responsables de las picaduras, ya que necesitan sangre para desarrollar sus huevos. Estos insectos suelen estar más activos al amanecer y al anochecer, y se sienten atraídos por el dióxido de carbono que exhalamos y por el sudor.
Para protegerse de los mosquitos, es recomendable usar repelentes de insectos que contengan DEET, picaridina o aceite de eucalipto de limón. También es útil vestir ropa de colores claros y de manga larga, especialmente durante las horas de mayor actividad de estos insectos. En casa, se pueden instalar mosquiteras en ventanas y puertas, y utilizar ventiladores o aire acondicionado para mantener a los mosquitos alejados. Es importante eliminar cualquier acumulación de agua estancada, ya que es el lugar ideal para que los mosquitos depositen sus huevos.
Las avispas y las abejas son insectos que, aunque desempeñan un papel crucial en la polinización, pueden ser peligrosos si se sienten amenazados. Las picaduras de estos insectos pueden causar reacciones alérgicas graves en algunas personas, llegando incluso a ser mortales en casos extremos. Las avispas son más agresivas que las abejas y pueden picar varias veces, mientras que las abejas solo pican una vez y mueren después.
Para evitar picaduras de avispas y abejas, es aconsejable no usar perfumes fuertes ni ropa de colores brillantes, ya que pueden atraer a estos insectos. Si se encuentra cerca de un nido, es mejor alejarse lentamente sin hacer movimientos bruscos. En caso de ser picado, es fundamental retirar el aguijón lo antes posible y aplicar hielo en la zona afectada para reducir la hinchazón. Si se presenta una reacción alérgica severa, como dificultad para respirar o hinchazón en la cara y garganta, se debe buscar atención médica de inmediato.
