Reino Unido y Suecia (que además ha cerrado su embajada) han hecho peticiones similares a sus nacionales
"Salir del Líbano en el primer vuelo que haya libre". Esa es la recomendación que ha hecho la Embajada de Estados Unidos a sus ciudadanos que están viviendo actualmente en este país, en una prueba evidente de que ve cada vez más factible una escalada en el conflicto que implique no solo a Israel contra las milicias de Hizbulá, sino también a Irán.
Otros dos países han tomado en las últimas horas una medida similar. Tanto Reino Unido como Suecia (que ha cerrado temporalmente su embajada) han pedido a sus nacionales que abandonen la región cuanto antes.
La situación se ha enrarecido especialmente después del asesinato del líder de Hamás Ismail Haniye cuando se encontraba en Irán, lo que hace prever una respuesta por parte de este país.
En concreto, la Embajada de Estados Unidos ha urgido a sus ciudadanos a hacerse con el primer billete de avión disponible. A los que os que no puedan o no quieran irse, les insta a pereparar planes de contingencia, como por ejemplo la identificación de refugios, en el caso de que el conflicto actual entre Israel y Hezbolá termine de estallar definitivamente.
La Embajada de Estados Unidos recuerda además que varias aerolíneas han suspendido o cancelado vuelos pero asegura que todavía hay oportunidades disponibles, aunque no sean las más propicias, para salir del país, informa Europa Press.
"Animamos a quienes deseen salir del Líbano a reservar cualquier billete disponible, incluso si el vuelo no sale inmediatamente o no sigue la ruta elegida en primera instancia", ha explicado la Embajada en una alerta publicada este sábado. Los ciudadanos sin dinero para salir del país tienen la posibilidad de contactar con la Embajada para recibir ayuda de los llamados "préstamos de repatriación", que consisten en la devolución al Gobierno estadounidense del precio del billete a su retorno a EEUU.
A quienes decidan quedarse, la Embajada pide que "vayan preparando planes de contingencia para situaciones de emergencia" y que "estén preparados para buscar refugio durante un amplio plazo de tiempo". La Embajada avisa a sus ciudadanos que no dependan del gobierno en el caso de crisis por lo que insiste en que "hagan planes de salida que no dependan del Gobierno", mantengan los móviles cargados en caso de emergencia y estén preparados para refugiarse en el lugar escogido si la situación "se deteriora".
El último escalón en el conflicto ha sido la confirmación por parte dl Ejército israelí de haber matado a un miembro de Hizbulá, Nazih Abed Ali, en la zona de Bazuriya, en el sur de Líbano, al que identificó como un "importante terrorista del frente sur" del grupo chií libanés.
"Abed Ali estaba involucrado en la actividad terrorista del frente sur, planificando y llevando a cabo diversas actividades terroristas contra Israel", indicó el Ejército israelí.
El grupo libanés también confirmó la muerte de Abed Ali, sin dar detalles sobre las circunstancias, informa Efe.
Israel afirmó que su eliminación "representa un duro golpe" para las capacidades del frente sur de Hizbulá, en un momento de máxima tensión en la región, cuando el grupo chií juró venganza por el asesinato de su máximo jefe militar, Fuad Shukr, el pasado miércoles.
La Agencia Nacional de Noticias libanesa informó de la muerte de una persona, que no identificó, y de otros dos heridos en un bombardeo israelí con un dron contra el vehículo en el que viajaban en la misma zona.
La frontera entre Israel y Líbano vive su mayor pico de tensión desde 2006 con un intenso intercambio de fuego desde octubre, que se ha cobrado la vida de más de 580 personas, la mayoría en el lado libanés y en las filas de Hizbulá, que ha confirmado 355 bajas, algunas en Siria; además de unos 110 civiles.
En Israel han muerto 47 personas en el norte: 22 militares y 25 civiles, incluidos 12 menores drusos en el ataque de Majdal Shams, en los Altos del Golán ocupados, hace una semana.
Las hostilidades en la divisoria comenzaron el 8 de octubre, al día siguiente de que estallara la guerra en la Franja de Gaza, en solidaridad de Hizbulá con las milicias islamistas palestinas del enclave palestino.
