La DGT tiene como único objetivo proporcionarle a los Españoles seguridad vial, es decir, proteger las vidas de quienes transitan las calles del país, tanto como peatón o sobre un vehículo. Ahora que se acerca la operación salida del día 1, las multas y otros tipos de sanciones se convierten en más que una herramienta para hacer valer las normas de tráfico y se convierten en garantes de la vida y el bien de la comunidad.
Cabe resaltar que las multas de tránsito son muy distintas entre si, ya que entran varias cuestiones. Existen infracciones leves, graves o muy graves. Una de las infracciones más graves y con sanciones más altas es conducir sin seguro. En España, todos los vehículos deben contar con un seguro obligatorio de responsabilidad civil que cubra los daños a terceros en caso de accidente. La multa por no tener este seguro puede alcanzar los 3.000 euros.
Otra infracción severamente penalizada es la no identificación del conductor. Si el propietario del vehículo no identifica al conductor responsable de una infracción, puede enfrentarse a una multa de hasta 1.500 euros. Esta medida tiene como objetivo garantizar que las sanciones se apliquen a los verdaderos responsables y evitar que los propietarios de vehículos eludan sus responsabilidades.
Una de las infracciones más costosas es el uso de dispositivos que inhiben los radares de velocidad. Estos dispositivos están diseñados para interferir con los sistemas de control de velocidad, permitiendo a los conductores exceder los límites sin ser detectados. La multa por utilizar estos dispositivos puede ascender a 6.000 euros, además de la retirada de seis puntos del carnet de conducir.
Conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas también está severamente sancionado. Las multas pueden superar los 1,000 euros y, en los casos más graves, pueden incluir penas de prisión y la retirada de hasta seis puntos del carnet. La conducción en estado de embriaguez o bajo el efecto de sustancias es una de las principales causas de accidentes de tráfico.
Algunas de estas infracciones no permiten el descuento por pronto pago. Generalmente, la DGT ofrece un descuento del 50% en el importe de la multa si se paga dentro de los 20 días naturales siguientes a la notificación de la sanción. Sin embargo, en el caso de infracciones muy graves, como el uso de dispositivos inhibidores de radar o la negativa a someterse a pruebas de alcohol o drogas, este descuento no se aplica.
En estos tres casos, la cuantía económica de las sanciones no se podrá reducir al 50%:
