¿Por qué tengo que pagar gastos de gestión de una entrada que he reservado, pagado, descargado e impreso personalmente? ¿Cuál es la gestión que realmente está haciendo la compañía ticketera para cobrarme un importante recargo sobre el valor de la entrada? Estas preguntas no sólo se las hacen los consumidores, sino que la propia Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) considera que estos pagos adicionales son abusivos.
La OCU advierte de que muchos vendedores de entradas online imponen gastos de gestión que pueden superar el 10% del precio de la entrada, sin que haya una prestación de servicio adicional por el organizador del evento, una práctica que resulta "inaceptable y abusiva". De hecho, un análisis de la OCU sobre la adquisición de entradas online para eventos culturales y deportivos revela que, en 28 de 50 compras, los gastos de gestión superaron el 20% del precio original de la entrada. "Esto representa un incremento significativo en el coste final para el consumidor y a menudo injustificado", argumenta la OCU.
Pero hay casos peores. En eventos de alta demanda, como conciertos y partidos de fútbol, los gastos de gestión llegaron a duplicar el coste base de la entrada. En otros casos, se encontraron variaciones significativas en los gastos de gestión para el mismo evento dependiendo de la plataforma de venta utilizada.
Esta situación no solo afecta económicamente a los consumidores, sino que también genera una sensación de desconfianza y frustración. "Los compradores a menudo no son conscientes del coste total a pagar hasta las etapas finales del proceso de compra, lo cual puede llevar a decisiones impulsivas o a la cancelación de la compra por el alto precio inesperado", denuncia la OCU.
Por consiguiente, aunque la OCU celebra la reciente publicación de la Dirección General de Consumo, que ratifica su posición respecto a la aplicación abusiva de los gastos de gestión en la compra de entradas a través de internet, insta al organismo a implementar de inmediato una serie de medidas para erradicar estos abusos:
-Regulación estricta de los cargos de gestión, estableciendo límites máximos en proporción al precio de la entrada.
-Obligatoriedad de transparencia en la comunicación de todos los cargos adicionales antes de la confirmación de la compra.
-Sanciones a las plataformas que apliquen cargos injustificados, desproporcionados o engañosos.
La OCU defiende que se debe actuar con la máxima celeridad para implementar medidas que erradiquen estos abusos. "La protección de los consumidores no puede esperar", insiste. Se considera crucial establecer mecanismos efectivos para asegurar que los derechos de los consumidores sean respetados y que se eviten prácticas engañosas y abusivas en la venta de entradas online.