Ser una chica "brat" no es poca cosa. El significado de esta palabra de manera literal, si lo traducimos al español, sería "mocoso", "malcriado". Pero ahora va mucho más allá. En parte gracias a las redes sociales, con una capacidad inmediata y a grandes escalas para acuñar conceptos, o modelar sus significados, la palabra "brat" cuenta con su propio universo. Quizá incluso nos pueda recordar a esas muñecas de grandes ojos y labios, de rabillo y ropa atrevida, que emergieron en una época conquistada por el correctismo de Barbie. "Brat" es, por tanto, la mujer transgresora, que huye de las formalidades y de la imposición del concepto de "mujer ordenada y limpia", y que vela por la libertad de expresión en su máximo nivel. Una definición revolucionaria que se ha hecho posible gracias a la música y, especialmente, a su creadora: Charli XCX. La cantante y compositora inglesa ha lanzado este año "Brat", un álbum que le está haciendo recorrer múltiples países con gran repercusión, y que está sirviendo de inspiración a todo tipo de personas: desde su propio público hasta Kamala Harris.
De nombre Charlotte Emma Aitchison, la artista es también productora y directora de vídeos musicales. Nació en Cambridge, y desde joven comenzó a coquetear con la música: sus creaciones fueron descubiertas en Myspace por el productor con el que firmó su primer contrato discográfico. Poco a poco, se fue convirtiendo en un icono de la música dance fusionada con la electrónica, el pop e incluso el punk. Al más puro estilo de caza de brujas, el estilo de Charli XCX bebe del descaro de artistas como Britney Spears, Siouxsie Sioux, Rihanna, Madonna o Donna Summer. Pero su figura no gira en torno a su sonido, sino que va más allá, y juega un gran papel en ello la estética. La compositora, siempre bajo mirada desafiante y aspecto rompedor, imponente, ha demostrado en su último álbum hasta qué punto lo visual juega un papel importante en un proyecto. Tal es así que el verde limón que tiñe la cubierta del disco se está convirtiendo, de alguna manera, en el color del verano.
Pero si cabe mencionar un caso claro en el que la influencia de Charli XCX está brillando, ese es el de Kamala Harris. A pocas horas de que Biden publicase su carta de renuncia, la cantante publicó en X un simple "Kamala IS brat". Y no quería definir a la nueva candidata a la presidencia como una mocosa, sino todo al contrario: como una mujer luchadora, informal, intransigente, consecuente... Una "brat", asegura Charli, de manual.
Y la alusión de la cantante hacia la política fue correspondida. Este lunes la antigua cuenta de X de la campaña Biden-Harris se renombró después del anuncio del presidente, así como también su estética. En la cabecera del perfil se ha utilizado una imagen con el mismo verde limón de la carátula de "Brat", con las palabras "kamala hq" escritas de la misma manera que el disco de Charli: en minúsculas, de color negro y con la misma caligrafía.
De esta manera, la campaña de Kamala Harris se ha visto reforzada por los seguidores de Charli XCX, quienes no han tardado en difundir en las redes sociales numerosas composiciones de la candidata bajo los atributos de "brat". Todas ellas bajo la citada tipografía y, por supuesto, ese para nada desapercibido color verde chillón.
