Diez empleados sanitarios y sociales de un centro de Roma para personas con discapacidad, gestionado por la Cruz Roja, fueron arrestados este martes acusados de tortura, agresiones y malos tratos a dos pacientes, en un caso que la Fiscalía ha descrito como un "túnel de los horrores".
Según los carabineros -la policía militarizada italiana a cargo de la operación-, estos diez trabajadores insultaban, daban bofetones o puñetazos y despertaban bruscamente por la noche a dos pacientes, en una dinámica de abusos prolongada que acabó siendo destapada, según medios locales.
La investigación sobre el Centro de Educación Motora de Roma comenzó tras una primera denuncia en abril de 2023 por parte de algunos miembros de la Cruz Roja, que empezaron a sospechar tras observar un hematoma en la cara de uno de los pacientes, informa Efe.
Las pesquisas, llevadas a cabo por una unidad de los carabineros especializada en delitos contra personas vulnerables, se prolongaron hasta noviembre pasado e incluyeron grabaciones con cámaras ocultas en el propio centro que documentaron las escenas de violencia.
Tras las detenciones, cinco empleados están acusados de tortura y otros cinco de malos tratos, mientras que se sospecha de un posible delito de violencia sexual por parte de un trabajador, que en una ocasión habría abusado sexualmente de la paciente afectada.
"Los sospechosos no sólo ejercieron violencia constante y sin precedentes sobre personas completamente incapaces de reaccionar, sino que acompañaron sus indescriptibles acciones con palabras de burla que estigmatizaron" todavía más a las víctimas, consideró el juez de Instrucción encargado del caso.
Las investigaciones continuarán para determinar si hubo también otros pacientes del centro agredidos.
