Ultimamente se ha observado una tendencia creciente y generalizada hacia una alimentación más saludable. Cada vez son más las personas que prestan atención a lo que se llevan a la boca.
Los lácteos son uno de esos grupos de alimentos que más dudas suscitan, principalmente porque las etiquetas y la publicidad no se suele corresponder con la realidad; yogures líquidos que aseguran reducir el colesterol, yogures infantiles que prometen hacer crecer a los niños y yogures de 'frutas' que en realidad contienen aromatizantes, colorantes e importantes cantidades de azúcar o edulcorantes.
Aunque ya hay mayor consenso acerca de que el yogur natural es la mejor opción, todavía hay algunas dudas, por ejemplo, acerca del bífidus. ¿Cuál es la opción más saludable: yogur natural o bífidus?
La nutricionista ha compartido un vídeo con sus más de 650 mil seguidores en el que aborda precisamente esta cuestión.
En primer lugar, García aclara las diferencias entre ambas: "Para que en el etiquetado ponga yogur natural, la leche ha debido fermentar con dos bacterias: lactobacilus bulgaricus y streptococcus thermophilus. Sin embargo, los que tienen bífidus no se han fermentado con esas bacterias. Se han fermentado con bífidobacterias, de ahí que no se llame 'yogur', y sea conocido como 'leches fermentadas'".
Pero la experta trae buenísimas noticias porque "no hace falta elegir entre yogur o leches fermentadas". Cuánto más diversa sea nuestra microbiota mejor. Es decir, cuánto más distintas sean las bacterias que ingerimos, más enriqueceremos la microbiota. "Así que siempre que no haya azúcar añadido" las dos opciones son igualmente saludables y adecuadas, según García.
Los bífidus o yogures con bífidus, ofrecen diversos beneficios para la salud:
El mejor momento del día para tomar probióticos puede variar según las necesidades individuales y el tipo de probiótico. Sin embargo, hay algunas recomendaciones generales que pueden ser útiles.
Tomar probióticos en ayunas puede ser beneficioso porque el estómago está vacío, lo que facilita la llegada de los probióticos al intestino, donde ejercen su efecto. Esto puede optimizar la proliferación de bacterias beneficiosas, ya que hay menos interferencias en el proceso de digestión.
Otra opción es tomar probióticos con las comidas. Esto puede mejorar su tolerancia y minimizar posibles molestias gastrointestinales. Además, acompañar los prebióticos con alimentos puede ayudar a protegerlos del ácido estomacal, permitiendo que más cantidad llegue al intestino y ejerza sus beneficios.
Por último, algunas personas prefieren tomar probióticos antes de acostarse. Esto puede permitir una mejor fermentación y proliferación de bacterias beneficiosas durante la noche, cuando el sistema digestivo está menos activo y puede centrarse en la asimilación de estos compuestos. Cada persona puede encontrar el momento que mejor se adapte a su rutina y maximice los beneficios de los probióticos.
Para que un yogur con bífidus sea saludable debe contener exclusivamente leche entera de vaca pasteurizada, fermentos lácticos y bifidobacterium. Nada más. A menudo se le incorpora ingredientes innecesarios e incluso perjudiciales como edulcorantes, azúcar, etc.