El mundo está viviendo un 'boom' sin precedentes de gripe aviar. Un nuevo subtipo del virus, el H5N1, apareció en 2021 y desde entonces ha provocado el sacrificio de cientos de millones de aves de granja y la muerte de millones de aves silvestres. En el último año, las autoridades sanitarias han observado no solo un aumento en los contagios entre estos animales, sino también la aparición de casos en mamíferos. Además, EE UU anunció el pasado miércoles un cuarto caso de infección de un trabajador de una explotación ganadera en Colorado, donde previamente se había detectado un brote entre vacas lecheras.
En este contexto, el Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) ha aconsejado aumentar la vigilancia ante los casos de gripe aviar, aunque ha destacado que los virus circulan a niveles bajos entre las aves silvestres en la Unión Europea y el Espacio Económico Europeo (UE/EEE). El ECDC señala que, en EE UU, se ha observado recientemente la transmisión del virus de la influenza aviar altamente patógena H5N1en ganado lechero, y se han reportado cuatro casos de influenza aviar humana entre trabajadores agrícolas desde abril de 2024. Aunque la transmisión de animales infectados a humanos "sigue siendo un evento poco común", los virus de influenza aviar pueden propagarse a animales salvajes, de granja y domésticos, causando infecciones y brotes en aves de corral y, ocasionalmente, en mamíferos, advierte.
"Mientras monitoreamos de cerca la situación de la gripe aviar en la UE y a nivel mundial, es necesario aumentar la conciencia, aunque no la preocupación. El ECDC apoya las medidas adoptadas por las autoridades nacionales de los Estados miembros de la UE. Esta amenaza para la salud humana no debe subestimarse, y es crucial mantenerse alerta y proactivo en la colaboración conjunta", ha afirmado la directora del ECDC, Pamela Rendi-Wagner.
Hasta ahora, no se ha registrado ninguna infección por el virus H5N1 en humanos en la UE/EEE. No obstante, el ECDC subraya la importancia de sensibilizar a los profesionales sanitarios, tanto de atención primaria como secundaria, sobre la posibilidad de encontrarse con casos humanos de infección. Por ello, el ECDC está implementando una estrategia integral para apoyar la detección temprana y la contención de posibles casos humanos. "Es importante destacar que actualmente el riesgo de influenza aviar zoonótica para la UE/EEE sigue siendo bajo para la población general y bajo a moderado para las personas expuestas por razones laborales o de otro tipo", explican desde el Centro.
El ECDC está llevando a cabo iniciativas para abordar la potencial amenaza de la gripe aviar para la salud humana y ha elaborado varios documentos de orientación e informes recientes sobre pruebas, vigilancia, investigación de brotes y opciones de salud pública. En una guía de vigilancia actualizada recientemente para el verano, recomienda reducir el umbral para las pruebas de detección de la gripe aviar en humanos y adoptar un enfoque basado en el riesgo para las personas asintomáticas expuestas. También aconseja realizar pruebas de detección de gripe en todos los casos hospitalizados con síntomas compatibles con la gripe aviar e investigar las muestras positivas para la gripe A que sean negativas para el virus de la gripe estacional. Las medidas de bioseguridad y protección personal en lugares con mayor riesgo de gripe aviar "siguen siendo cruciales para minimizar el riesgo de contagio a los humanos", señala el ECDC, y añade que "estas medidas deben cumplirse al máximo".
Además, también ha reforzado su apoyo a los países de la UE en actividades de laboratorio sobre la gripe aviar zoonótica, incluyendo la preparación de laboratorios para detectar y caracterizar los virus de la gripe zoonótica. El ECDC ofrece pruebas centralizadas en la UE y una caracterización adicional de muestras humanas que se sabe o se sospecha contienen un virus de la gripe aviar. Además, junto con la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), y la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo (EU-OSHA), así como organizaciones internacionales como la Organización Mundial de la Salud y los principales Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), continúa monitoreando de cerca la influenza aviar en la UE y globalmente.