El uso de redes sociales o aplicaciones para avisar de radares y controles de la Policía supondrá fuertes sanciones en la nueva reforma de la Ley de Tráfico
Con la primera operación salida de este verano 2024 a la vuelta de la esquina, la Dirección General de Tráfico ultima un conjunto de medidas para mejorar la seguridad de los conductores en las carreteras. Al mismo tiempo, la DGT endurecerá las multas en búsqueda de revertir los malos resultados en España en materia de siniestralidad (que también salpican al resto de Europa), y uno de los puntos en los que hará hincapié serán las redes sociales o aplicaciones que usan los usuarios para saber dónde hay radares o controles de la Policía.
Hasta ahora, otros países como Francia o Suiza habían hecho hincapié en este punto, pero España pasará a ser uno de ellos. El Gobierno ya tiene la propuesta para acabar con este panorama y además, se sancionará su uso con una multa de hasta 500 euros.
Social Drive es uno de este tipo de aplicaciones por excelencia. Permite a los conducteros compartir y recibir información en tiempo real sobre el estado de las carreteras, tales como accidentes, carreteras cortadas u otros eventos que afecten a la conducción. Una herramienta colaborativa donde los usuarios puede tanto aportar información como consultarla, ayudándose mutuamente para evitar problemas en las vías y mejorar la seguridad vial.
Otro caso es Waze, muy similar a la anterior. Es conocida por su enfoque colaborativo, permitiendo a los usuarios contribuir y actualizar la información del tráfico de manera continua, pues proporciona navegación en tiempo real, rutas alternativas y también información del tráfico, informando así del estado de las vías, radares o posibles controles policiales.
Son solo dos ejemplos de las aplicaciones que utilizan los conductores para tener conocimiento de lo que sucede en las carreteras, de tal manera que podían evitar vías en las que hubiera algún radar o control policial con comentarios en tiempo real, pudiendo escapar de ser parados o multados. Pero el endurecimiento de las normas de Tráfico ante los datos de siniestralidad españoles (en España se ha incrementado un 6% el número de fallecimientos en las carreteras) podría poner fin a estas plataformas y multar a sus usuarios.
La reforma cuenta con el visto bueno del Ministerio del Interior. Así, la DGT podría aplicar el artículo 36.2 de la Ley de Seguridad Ciudadano, que trata de incidir negativamente sobre operativos policiales. Por otro lado, se ha propuesto la modificación del artículo 77 de la Ley de Tráfico, para contemplar como muy grave la infracción de avisar a otras personas.
Las nuevas normas que está terminando de tramitar Tráfico forman parte de una reforma del Reglamento General de Circulación, centrada especialmente en los usuarios vulnerables como peatones, ciclistas, conductores de vehículos de movilidad personal y motociclistas, según informa Servimedia.
Una reforma por la que la DGT ha estado trabajando más de tres años, y entre las novedades, está la reducción de las tasas de alcoholemia permitidas a los conductores (que pasarán a ser de 0,2 gramos por litros de sangre o 0,15 mg por litro de aire respirado, reduciendo así la tasa de 0,3 gramos y 0,1 miligramos impuesta actualmente.
También la obligación de llevar casco homologado a los conductores de patinetes, que deben ser mayores de 16 años. Así, los conductores de motocicletas, ciclomotores, ciclos y bicicletas también deberán llevar chalecos reflectantes de alta visibilidad. Pero también otras medidas que afectarán a los autobuses o ciclistas, entre otros.
