El ministro de Presidencia, Félix Bolaños, ha explicado que el acuerdo con el PP para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) deja en manos de los nuevos vocales hacer una propuesta de reforma del sistema de elección de ese órgano que "se debatirá, se tramitará y en su caso de acordará".
Entrevistado en TVE, y al ser preguntado sobre si la propuesta de los vocales será vinculante, Bolaños ha señalado que la disposición pactada "lo deja bien claro": los vocales tendrán seis meses para estudiar los modelos europeos y, con el aval de tres quintos, trasladar una reforma al Gobierno, al Congreso y al Senado, "las instituciones que tienen la iniciativa legislativa"
"Por supuesto, si se puede mejorar el modelo, hagámoslo, pero lo esencial de ese acuerdo es que basa en un amplio consenso", ha manifestado el ministro, quien ha recordado que el actual modelo de elección por las Cortes se basa en un gran pacto de Estado alcanzado entre PP y PSOE en 2011, renovado en 2013 y ratificado de nuevo ahora.
Bolaños se ha remitido a los "términos estrictos" pactados con el PP: los titulares de la iniciativa legislativa, basándose en la propuesta de los vocales, elaborarán y someterán a la consideración de las Cortes Generales "un proyecto de ley o proposición de ley de reforma del sistema de elección de los vocales judiciales para su debate, y en su caso, tramitación y aprobación".
Según ha señalado, en estos momentos no hay conversaciones en marcha con el PP para renovar otros puestos vacantes -Banco de España, Comisión Nacional del Mercado de la Competencia (CNMC) y RTVE-, "pero tiene que haberlas próximamente"
"Sigamos hablando e intentando llegar a grandes consensos", ha manifestado Bolaños, quien ha confiado en el inicio de una nueva etapa con el PP y se ha mostrado convencido de que el acuerdo entre las dos principales fuerzas políticas lanza un importante mensaje al país al apostar por acabar con el clima "tóxico" de crispación.
En ese contexto, ha calificado de "exageradas" e incluso "estrambóticas" las primeras intervenciones públicas del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, tras firmarse el pacto.
Ante la petición de dimisión del fiscal general del Estado, ha opinado que se le esté criticando por "hacer su trabajo, perseguir el delito e intentar aclarar los hechos" en el caso del presunto fraude a Hacienda de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
A su juicio, lo que está habiendo es una persecución a los fiscales, "cacerías" a las que ya están acostumbrados cuando perseguia delitos, como ocurrió en la trama Gürtel.
EFE