A última hora, y después de las críticas, el Gobierno ha decidido finalmente que sea la ministra de Defensa, Margarita Robles, la que acompañe al Rey en la visita que ha iniciado hoy a los países bálticos para visitar a tres contingentes españoles desplegados allí. Y es que en un primer momento ningún miembro del Ejecutivo, ni ella ni el titular de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, iba a viajar con Felipe VI, pese a tratarse de una visita clave por las implicaciones que tiene en la defensa aliada frente a la amenaza rusa y su escalada en la guerra de Ucrania.
Y ha sido tal las prisas para enviar a un ministro que Robles únicamente acompañará al capitán general Borbón el último de los tres días que durará esta visita oficial: el martes, cuando se desplazará hasta la ciudad de Adazi (Letonia), para visitar a los cerca de 620 militares españoles que forman parte del batallón de la OTAN liderado por Canadá.
"La ministra de Defensa, Margarita Robles, acompañará el próximo martes a Su Majestad el Rey, en Letonia, en su visita a las tropas desplegadas en el país". Este es el escueto mensaje con el que el Ministerio de Defensa ha confirmado esta mañana que finalmente será Robles quien se desplace hasta el flanco Este con el Monarca. De hecho, hasta as 13:30 horas de hoy en su agenda oficial únicamente figuraban dos actos para ese día: "Asiste a la reunión del Consejo de Ministros" (9:30) y "Presentación, en la sede del ministerio, de la Plataforma de la Fundación CEOE 'Es tu fuerza'".
Ha sido entonces cuando se ha incluido finalmente que "Acompaña a SM el Rey y visita a las tropas en Letonia-Base Militar de Adazi" (12:00), manteniendo por el momento las otras dos citas.
De esta forma, Felipe VI visitará sin compañía de miembros del Gobierno a dos de los tres contingentes desplegados en la zona. El primero, hoy, en el puerto de Tallin (Estonia), donde han hecho escala los cuatro buques que forman el Grupo de Combate "Dédalo", que acaba de terminar su participación en las maniobras "Baltops" de la Alianza. A bordo de todos ellos, más de 1.700 efectivos, a los que el Rey saludará embarcando en el portaaeronaves "Juan Carlos I".
También estará solo mañana, cuando se desplace hasta la ciudad de Siauliai (Lituania) para visitar el destacamento "Vilkas", con el que España protege el espacio aéreo aliado. Allí hay 190 efectivos, ocho cazas F-18 y un avión de transporte y reabastecimiento A400M como parte de la Policía Aérea del Báltico de la OTAN (BAP). El Rey presenciará un simulacro de alerta real, en el que los cazas hand e despegar en menos de 15 minutos para interceptar e identificar una aeronave sospechosa, que en la gran mayoría de los casos pertenecen al Ejército ruso, que vuela por la zona sin identificar. En otras visitas de miembros del Gobierno han vivido alertas reales.
Una visita esta de Felipe VI que también supone un guiño y apoyo a la unidad de la OTAN y a la contribución a la seguridad y defensa colectiva, sobre todo después de que se conociera que España es el último aliado en gasto militar.
