En la Eurocopa 2024 se han visto varios goles en propia puerta, pero lo que sucedió en el partido entre Turquía y Portugal se lleva la palma porque la acción no es fruto de la mala suerte, es consecuencia de una enorme falta de comunicación.
Portugal ya mandaba por 1-0, tanto de Bernardo Silva, y buscaba el segundo, aunque Turquía también había amenazado. Uno de los ataques lusos fue abortado por la defensa con facilidad. El portero, Bayindir, se fue a por la pelota, a un lado. El defensa, Akaydin, no vio ese movimiento y se la entregó al lugar en el que estaba antes, lo que se convirtió casi en un remate a puerta. El balón iba directo a gol, no demasiado fuerte, pero lo suficiente para convertir la acción en dramática. Zeki Çelik corrió a la desesperada para intentar despejar la pelota, también el propio guardameta. El futbolista llegó a hacerlo, cuando ya había entrado por medio metro.
El gol subió al marcador y los portugueses lo celebraron. Fue tan inesperada la jugada que hasta el realizador de televisión se la perdió en un primer momento.
Es el sexto tanto en propia puerta que se ha marcado en este Eurocopa, casi todos además con una influencia importante. Los anteriores: Rüdiger en el Alemania - Escocia (que acabó 5-1), Wober en el Austria - Francia (0-1), Hranac en el Portugal - República Checa (2-1), Gjasula en el Croacia - Albania (2-2) y Calafiori en el España - Italia (1-0).
