La comunidad del baloncesto norteamericano está conmocionada después de que el exjugador de la NBA y actual miembro de la G-League, Chance Comanche, y su novia Sakari Harnden, hayan sido acusados del asesinato de una joven de 23 años. El pívot de 27 años, que actualmente milita en los Stockton Kings, fue detenido en Sacramento (California) el pasado viernes por un presunto delito de secuestro, días después de que su novia fuera arrestada por los mismos cargos. La situación se agravó con la acusación de asesinato tras el hallazgo de los restos de la desaparecida, identificada como Marayna Rodgers.
La investigación comenzó el 7 de diciembre después de que dos personas denunciaran la desaparición de la joven, que trabajaba como asistente médico y había viajado a Las Vegas con amigos. La Policía reveló que tenían sospechas de un posible crimen y, tras obtener pruebas, arrestaron a Harnden y a Comanche por su supuesto papel en el secuestro y desaparición de Rodgers. Posteriormente, tras el arresto de la pareja, los agentes recuperaron restos humanos en una zona desértica en Henderson (Nevada), confirmados por el forense del condado de Clark como pertenecientes a Rodgers, lo que llevó a la acusación de asesinato contra ambos.
Chance Comanche debutó la pasada temporada en la NBA con los Portland Trail Blazers, disputando únicamente un encuentro. El 2 de octubre firmó un contrato con los Sacramento Kings, que fue rescindido diez días después. Tras esto, el 9 de noviembre volvió a los Stockton Kings, donde ya había estado presente en la temporada 2022-2023.
