La Presidencia presume un conjunto de logros en materia económica a través de gráficas publicadas en su cuenta de la red social X. Presume, por ejemplo, un récord en reservas internacionales y remesas, un elevado crecimiento económico y una canasta básica por debajo de la inflación. La mayoría de éstos son, sin embargo, falsos. Son un intento de engañar de diversas formas.
Hace 15 días, en este mismo espacio, desenmascaramos la realidad acerca del crecimiento económico del sexenio. En ese sentido, éste ha sido el peor de los últimos cinco sexenios con un crecimiento promedio de sólo uno por ciento por año. Ahora revisaremos algunos otros de los “logros” que presume la Presidencia del sexenio que acaba de terminar.
Tal vez lo que menos tenga sentido sea el vanagloriarse de que el “sexenio marca un nuevo récord en remesas”. Las remesas son más una muestra del fracaso económico del país que de su fortaleza. Este dinero es beneficioso para las familias que lo reciben, pero muestra que muchos mexicanos que están dispuestos a trabajar para salir adelante tienen que migrar a otro país porque en el suyo no se tienen oportunidades suficientes para lograrlo.
Por otro lado, está el tema de las reservas internacionales. Aquí el gobierno presume un “récord en reservas internacionales”. Estos activos los administra Banco de México y si están en un nivel elevado puede ser más por la autonomía del banco central que por virtud del gobierno federal. Recordemos que, en agosto de 2021, Andrés Manuel López Obrador sugirió pagar la deuda del gobierno con una asignación de activos del Fondo Monetario Internacional (FMI) que sirve para complementar las reservas del país y el banco central tuvo que negar la posibilidad de que así se hiciera.
Además, el monto de las reservas no nos dice mucho, es necesario evaluar si las reservas son suficientes. En este sentido, el Fondo Monetario Internacional propone ciertas mediciones. Una de estas consiste en medir cuántos meses de importaciones cubren estos activos. En México, esta medida pasó de ser 4.2 meses en 2018 a 3.7 meses en 2023, que es el último dato reportado por el FMI. Esto indicaría un monto de reservas menos adecuado en 2023 que al inicio del sexenio. Sin embargo, si usamos una medida diferente y comparamos las reservas con la deuda de corto plazo del país, se ha mejorado en este sexenio. El punto es que si medimos seriamente si las reservas son suficientes, no es claro que haya una mejora en el sexenio y, en todo caso, habría que atribuírselo más al Banco de México.
En otro tema, el gobierno federal presume una “canasta básica por debajo de la inflación”. Esta es la gráfica que más me desconcierta porque no muestra la inflación. A pesar del título que declara que la canasta básica está por debajo de la inflación, sólo muestra una estimación del costo de la canasta básica estimada por Profeco, pero no cuánto ha aumentado y, por lo tanto, no se puede comparar con la inflación.
Para este fin, usaremos los datos de INEGI, tanto de inflación general como de la canasta básica. El último dato que corresponde a agosto de 2024 muestra que los precios de la canasta básica han crecido más rápidamente que la inflación general (5.1 por ciento vs. 5.0 por ciento). Sin embargo, el mes anterior esta relación era la opuesta, por lo que la respuesta dependerá del mes elegido. Ahora bien, si tomamos el promedio del crecimiento anual de estos dos índices desde enero de 2018 hasta agosto de 2024, la canasta básica ha aumentado ligeramente más rápido que la inflación (5.4 por ciento vs. 5.1 por ciento). Lo importante es que, sea cual sea mayor, su promedio es muy elevado y ha representado un lastre para el bienestar de las familias mexicanas.
De esta forma, lo que muestra el gobierno federal no son realmente logros, aunque pretendan que así es. El hecho de que la Presidencia haya escogido presumir en sus redes sociales un conjunto de “logros” económicos que no son tales, lo que muestra en realidad es que no hay mucho que presumir con relación a la marcha de la economía durante el sexenio que acaba de terminar.