La tormenta tropical Francine se formó la mañana de este lunes frente a las costas de Tamaulipas y cerca de la frontera con Estados Unidos. El Centro Nacional de Huracanes (NHC) alertó que tomará fuerza y podría convertirse en huracán durante las próximas horas, por lo que mantiene de cerca su vigilancia.
Ante esta situación, la zona de vigilancia se mantiene desde Barra del Tordo, Tamaulipas, hasta la desembocadura del río Grande.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) prevé, como parte de su trayectoria, que este lunes 9 y el martes 10 de septiembre Francine continúe como tormenta tropical.
Será alrededor de las 18:00 horas del martes 10 de septiembre, cuando evolucione a huracán categoría 1 a 270 kilómetros al este-noreste de Barra el Mezquital, Tamaulipas.
La tormenta continuará su avance y se alejará de territorio nacional hasta llegar a Luisiana, Estados Unidos, donde tocaría tierra para después degradarse a tormenta tropical en tierra el próximo jueves 12 de septiembre.
Tras tocar tierra como posible huracán categoría 1, la trayectoria prevista explica que se convertirá en ciclón postropical a partir del viernes 13 de septiembre.
Los efectos de la tormenta tropical Francine dejarán lluvias extraordinarias en Tamaulipas y torrenciales en Veracruz.
Las precipitaciones intensas ocurrirán en Nuevo León, Puebla, Oaxaca y Chiapas, debido a que Francine tendrá interacción con el frente frío 1 y la onda tropical 21,
Las tormentas muy fuertes ocurrirán en San Luis Potosí, Hidalgo y Tabasco; fuertes en Tlaxcala, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, junto con chubascos y lluvias fuertes en el centro del país.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) alertó que las tormentas intensas estarán acompañadas de descargas eléctricas y rachas fuertes de viento, por lo que ocasionarían deslaves, así como el incremento en niveles de ríos y arroyos.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, puso a los equipos de emergencia del estado en alerta máxima y advirtió de la posibilidad de inundaciones repentinas y lluvias torrenciales.
“Texas continuará vigilando de cerca las condiciones meteorológicas para proteger el bienestar de los texanos”, dijo Abbott en un comunicado.
Donald Jones, un meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional en Lake Charles, Luisiana, explicó durante una sesión informativa que partes del sureste de Texas y el suroeste de Luisiana recibirían una gran cantidad de lluvia a mediados y finales de esta semana.
La perturbación tropical se registra luego de que agosto y principios de septiembre fueran inusualmente tranquilos en la actual temporada de huracanes en el Atlántico, que se extiende hasta el 30 de noviembre. La temporada alcanzará su punto máximo el martes, detalló Jones.
*Con información de AP
