Al cierre de la actual administración, las sucursales del Banco del Bienestar (BaBien) llegaron a mil 970 municipios del país, de los cuales mil 083 no eran atendidos por ninguna otra institución bancaria, expuso el Sexto Informe de Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
El documento destacó que el Banco del Bienestar alcanzó una cobertura nacional de 98.4 por ciento al ubicarse en dos mil 701 localidades cuya población conjunta fue de 124 millones de habitantes.
“De septiembre de 2023 a febrero de 2024, el Banco del Bienestar puso en operación 860 nuevas sucursales que en su totalidad alcanzaron dos mil 750 nuevas sucursales como resultado de la implementación del Plan de Expansión que, sumadas a las 399 sucursales tradicionales vigentes, conformaron una red de tres mil 149 sucursales”, reveló el último informe de la actual administración.
A junio de 2024, se contabilizaron 44.6 millones de cuentas en BaBien, cuyo fin principal es la entrega de recursos de programas sociales. Además, en los últimos dos años, el Banco del Bienestar aperturó más de 26 millones de cuentas de los beneficiarios de los apoyos del gobierno.
Al cierre de 2023, evidenció el Sexto Informe de Gobierno, se esparcieron recursos a 25.5 millones de personas beneficiarias únicas. Esto implicó un total de 97.6 millones de dispersiones por 478 mil 751.9 millones de pesos en apoyos gubernamentales, entre los que destacan la pensión para adultos mayores, las becas Benito Juárez y al menos 10 programas más.
Tan solo de enero a junio de 2024, se atendieron 24.6 millones de beneficiarios. En total, en el primer semestre de 2024 se dispersaron 369 mil 660.1 millones de pesos en apoyos.
En línea con lo que ocurre en el sector bancario, BaBien también promovió el desarrollo de nuevas tecnologías para fomentar el uso de transacciones electrónicas en los servicios que ofrece. El 26 de febrero pasado se pusieron en operación todas las sucursales y culminó este proyecto del gobierno.
“Con la nueva vocación de banca social se garantizó que todos los beneficiarios de programas sociales cuenten con una cuenta bancaria a su nombre y una tarjeta de débito para recibir los apoyos gubernamentales. Igualmente, se impulsó la educación e inclusión financiera con perspectiva de género”, concluyó.
