Las obras carreteras de acceso al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) realizadas por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador no han logrado reducir los tiempos de traslado de los pasajeros que han tenido que optar por viajar desde ese aeropuerto.
Un estudio del propio gobierno, realizado por el Instituto Mexicano del Transporte (IMT), refiere que los tiempos de traslado hacia el AIFA desde distintos puntos de la CDMX no se han reducido considerablemente ni siquiera con la construcción de obras carreteras que pretendían resolver el reclamo de los pasajeros.
El documento “Evolución de la accesibilidad del AIFA con la Zona Metropolitana de la Ciudad de México” toma como referencia siete rutas, en ambas direcciones, para analizar qué tanto cambiaron los tiempos de traslado hacia el AIFA tras algunas obras carreteras, como el puente de Tonanitla, una vía confinada sin cuota e inaugurada en febrero del 2023.
El análisis considera los pares destino que conectan desde y hacia el AIFA con Perisur, la Terminal Central de Autobuses del Poniente, el Zócalo, Indios Verdes, la Terminal de Autobuses del Sur en Taxqueñas, la TAPO y el propio Aeropuerto Internacional de la CDMX (AICM).
Para tener una base de datos confiable, el gobierno firmó un convenio de colaboración con Waze, una aplicación de monitoreo de tránsito basada en el sistema de Geoposicionamiento Global (GPS).
El IMT consideró tres diferentes horarios en función de los flujos importantes de pasajeros tanto en el AIFA como en el AICM, por lo que recabó la duración de traslado de las 7:00, las 10:00 y las 19:00 de cada día en el periodo de junio del 2021 al mismo mes del 2023.
El AIFA entró en operación en marzo del 2022, por lo que los datos de traslado del estudio muestran la dinámica anterior a la entrada en servicio del puerto aéreo de Santa Lucía y su primer año.
Los datos muestran que los tiempos de traslado no se redujeron e, incluso, se incrementaron desde y hacia algunos puntos como Perisur, Observatorio e Indios Verdes.
Por ejemplo, la ruta Perisur-AIFA aumentó 24 segundos en promedio en el horario más temprano analizado; en el tiempo máximo, el trayecto bajó apenas un par de minutos.
En tanto, el tiempo mínimo para ir desde ese punto del sur de la CDMX al AIFA a las 10 de la mañana aumentó en tres minutos entre el 2021 y el 2023, por lo que las obras carreteras no afectaron considerablemente el tiempo de traslado.
El gobierno encomendó a la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes una serie de obras para crear “nueve accesos viales que hacen más ágil la llegada a la terminal”, aseguró la dependencia en febrero del año pasado.
Las vías consideradas en el plan de conectividad eran el distribuidor principal al AIFA, la autopista urbana Siervo de la Nación, la ampliación del Mexibús, la autopista Toluca-Naucalpan, el acceso principal al AIFA, acceso San Jerónimo, la modernización de la autopista México-Pachuca, la vía provincial al AIFA y la ampliación del Tren Suburbano, el cual aún no entra en servicio.
La única ruta que registró una reducción significativa en el traslado fue la del Zócalo al AIFA, que en promedio se redujo 47 minutos en el horario de las 7:00 y poco más de una hora en el tiempo máximo de traslado en ese mismo horario.
La ruta TAPO-AIFA aumentó un promedio de dos minutos en cada uno de los horarios considerados, mientras que la conexión entre los dos aeropuertos, el Benito Juárez y el Felipe Ángeles tuvo aumentos de tres minutos en el horario nocturno y una ligera disminución de 9 minutos en el horario promedio matutino.
“Se debe tomar en cuenta que, para los análisis de los tiempos de recorrido, se consideró las vialidades en las cuales hubo modernización y construcción de infraestructuras que se realizaron para mejorar la conexión del AIFA, como lo es el Camino Libre a Tonanitla y el Distribuidor AIFA en el acceso actual de dicho Aeropuerto. Los tiempos de recorrido en las rutas de 2023 son muy semejantes a 2021, y en algunos casos se reducen significativamente”, concluye el estudio.
El AIFA necesita un sistema masivo de pasajeros para garantizar que estos lleguen en tiempo, además de que puedan regresar a los diferentes puntos de la ciudad sin la necesidad de esperar hasta un par de horas para abordar un taxi.